La Diputación Provincial de Málaga ha colocado aspersores de agua en cuatro corrales y en los chiqueros de la plaza de toros de La Malagueta para mejorar la estancia de estos animales, ya que, según los expertos, con este mecanismo se consigue bajar la temperatura ambiente hasta en cinco grados.

Además, se han colocado toldos en cinco corrales para crear zonas de sombra en las que se puedan cobijar del sol las reses bravas, como parte de las actuaciones de mejora que se han realizado a lo largo de este último año para el buen desarrollo de la Feria Taurina de Málaga.

El vicepresidente primero de la Diputación, Francisco Oblaré, que ha recorrido esta miércoles las instalaciones del coso malagueño junto al diputado provincial de Turismo y Promoción del Territorio y responsable de Asuntos Taurinos, Jacobo Florido, ha declarado que los toros son "muy cuidados en las dehesas y en el campo", y el nuevo equipo de gobierno "ha querido prolongar ese cuidado hasta el momento en que el toro salte a la plaza".

Estas actuaciones también engloban el rebaje del ruedo para que la altura con las tablas se adecue a la reglamentación vigente, así como la instalación de aire acondicionado en las dependencias de los equipos gubernativos, a las que ha dotado de equipos informáticos para el desarrollo del trabajo.

"Lo que no entendemos es que todo ello no se haya hecho en la anterior legislatura y nosotros lo hayamos tenido que hacer en un tiempo récord", ha afirmado Florido. Para ello, la Diputación ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Málaga y de la empresa que explota la plaza de toros, la unión temporal de empresas (UTE) Fernando Puche Doña.