Wall Street cerró este martes con sólidos avances una sesión marcada por la volatilidad y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, acabó con un ascenso del 3,98% con el que recuperó los 11.000 puntos que perdió la víspera, cuando anotó su mayor caída desde 2008.

Según datos provisionales al cierre, ese índice, que agrupa a las 30 mayores empresas cotizadas de EE UU, subió 429,92 puntos para cerrar en 11.239,77 unidades, al tiempo que el selectivo S&P 500 ascendió el 4,74% y el índice compuesto del mercado Nasdaq el 5,29%.

Los inversores de Wall Street se decantaban decididamente por las compras y recuperaban parte del territorio perdido la pasada sesión, después de la decisión de Standard & Poor's del viernes de rebajar la máxima calificación de la deuda de EE UU.

Este repunte también se produjo después de que la Reserva Federal decidiera mantener hasta mediados de 2013 los tipos de interés de referencia por debajo del 0,25%, continuando así con su política de estímulo monetario.

El efecto rebote de esta jornada no se vio mitigado por la publicación de los datos de productividad (mejores de lo previsto) de las empresas y de los trabajadores en Estados Unidos, que disminuyó un 0,3% entre abril y junio, según el Departamento de Trabajo, que además corrigió a la baja las cifras del primer trimestre.