La consejera de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Clara Aguilera, ha destacado que cada tres jubilaciones en el sector agrario sólo se incorpora un activo en Andalucía porque la actividad, a juicio de Aguilera, "no es atractiva" para los jóvenes.

En una entrevista concedida a Europa Press, la consejera del ramo ha indicado que "hay muy pocas solicitudes de jóvenes" e incluso "algunos desisten" desde que solicitan una ayuda a la Administración andaluza hasta que se resuelve. De esta manera, ha apuntado que el relevo generacional en el campo andaluz es deficitario.

Por contra, ha explicado que el nivel medio de las explotaciones andaluzas ha pasado en los últimos diez años de 13 a 18 hectáreas, lo que representa una "mayor viabilidad" al ser las explotaciones algo mayores, aunque dependerá de lo que se produzca en cada una.

Ante esta situación, Aguilera ha llamado la atención sobre la importancia de conseguir "atinar" en la reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) para mantener los pueblos vivos y mantener las condiciones óptimas en el medio ambiente. "Hay que atinar bien en la próxima PAC en presupuesto y medidas para hacer atractiva la agricultura o habrá un abandono importante", ha subrayado.

Por su parte, la Consejería de Agricultura y Pesca ha establecido una línea de ayudas para la primera instalación de jóvenes agricultores y para la modernización de explotaciones agrarias en Andalucía. Respecto a las ayudas a nuevas instalaciones de jóvenes agricultores, la Orden considera jóvenes hasta los 40 años, ya que en la actualidad sólo el siete por ciento de los agricultores son menores de 35 años, pero el 35 por ciento tiene menos de 40 años.

La Orden también amplía el rango de opciones para poder acceder a las ayuda a primera instalación de jóvenes agricultores posibilitando también en esta norma la instalación de jóvenes al frente de una instalación agraria sin necesidad de centrarse exclusivamente en la generación de rentas agrarias.

Entre los requisitos para poder optar a estas subvenciones, además de la edad, se encuentran que la explotación agraria se ubique al menos en un 50 por ciento en la Comunidad andaluza, que las inversiones mejoren el rendimiento de la explotación y que no hayan iniciado su actividad antes de la solicitud de la ayudas, además de poseer el nivel de capacitación suficiente para poner en marcha una explotación agraria. Deberá presentarse un plan empresarial y el compromiso de ejercer esta actividad y mantener las inversiones objeto de la ayuda durante al menos cinco años de la fecha del pago de la mismas.