Cruz Roja Española construye en Lorca un total de 12 viviendas prefabricadas para alojar a un total de 60 personas de distintas familias que perdieron sus casas por los terremotos del pasado 11 de mayo, según ha informado a Europa Press el presidente de esta ONG en Lorca, Juan Carlos García Ruiz.

Estas 60 personas vivían en las viviendas sociales de San Fernando, que se construyeron con motivo de la inundación de 1973 en la Alameda de Cervantes, pero el terremoto las dejó inhabitables y es preciso derruirlas. Tras los seísmos, estos ciudadanos fueron alojados en un campamento cercano, en el barrio del mismo nombre.

Así pues, la construcción de estas viviendas prefabricadas permitirá realojar a estas familias en unas condiciones "más dignas" que las que tenían hasta ahora en su actual ubicación, en el campamento de San Fernando, que será completamente desalojado.

La oficina de Cruz Roja en Lorca, que es la encargada de la ejecución de estas obras, cederá a los damnificados las viviendas, que están preparadas para alojar familias de dos, de cuatro, de ocho y de diez personas, puesto que están construidas con módulos que se pueden ir acoplando.

García ha dicho que se trata de viviendas preparadas para "estar en ellas de forma temporal hasta que vuelvan a reconstruir sus viviendas y puedan hacer de nuevo su vida normal".

Las casas tienen 42 metros cuadrados cada una, y cuentan con dos dormitorios, un cuarto de baño y un salón comedor, al tiempo que están equipadas con aire acondicionado, de forma que "están bien habilitadas y, aunque no son un hotel de lujo, son más dignas en comparación con el campamento que ocupan ahora".

La construcción de estas viviendas, que comenzó el pasado lunes, 1 de agosto, se lleva a cabo en una parcela de titularidad municipal situada junto al campamento provisional del barrio de San Fernando.

García explica que la construcción implica la extensión del alcantarillado, el saneamiento y la electricidad, así como la fijación de un suelo de hormigón sobre el que se construirán las viviendas, que ya van bastante avanzadas.

El próximo lunes está previsto continuar con la colocación de las paredes de pladúr y la fontanería, de forma que las viviendas se van a entregar completas, con muebles en su interior, para lo que Cruz Roja ha alcanzado un acuerdo con IKEA, que subvencionará todo el mobiliario de las casas.

García ha explicado que los gastos de la construcción se cargarán a los fondos con los que cuenta Cruz Roja procedentes de las donaciones de particulares y empresas.

Cruz Roja está a la espera de que el Ayuntamiento de Lorca les pida construir más casas prefabricadas, ya que la ONG está preparada y puede montar más viviendas de este tipo. De todas formas, García confirma que están a la espera de ver qué salida se les puede dar a los habitantes del otro campamento provisional, situado en La Torrecilla.

Precisamente, Cruz Roja tiene cuatro trabajadores sociales estudiando la situación en la que se encuentran las familias que se encuentran en ese campamento, para evaluar si es conveniente su traslado a otras viviendas, casas prefabricadas, o a otras zonas, dependiendo de la situación en la que se encuentren.

Otras acciones

Estos mismos fondos permiten ejecutar otras acciones como la escuela de verano que Cruz Roja realiza junto a Caixanova Galicia en los meses de julio y agosto para los niños de la zona de los colegios Pérez de Hita y Alfonso X, que fueron de los más afectado por el terremoto.

En concreto, esta escuela cuenta con cuatro turnos de unas 30 ó 35 personas cada uno, por lo que prestará servicio a unos 140 menores, que serán dirigidos por los monitores de Cruz Roja Juventud.

Entre otras cosas, estos menores van un día a la semana a las playas de Águilas y Mazarrón, donde hacen actividades con voluntarios de Cruz Roja, y otro día asistirán al parque Terra Natura de Murcia, que deja las entradas gratis, además de manualidades, deportes y juegos.