La responsable de Organización del Consejo Territorial de Unión Progreso y Democracia, Izaskun Fernández, ha manifestado su "indignación" ante la "nueva orientación" de la política institucional del Gobierno municipal de San Sebastián, al que ha acusado de tratar de "transformar la Casa de la Paz de Aiete en el marco del dirigismo y la distorsión macabra de nuestra historia más reciente".

En un comunicado, ha criticado que el nuevo alcalde donostiarra, Juan Carlos Izagirre, pretende "abrir el espacio al proceso de normalización política con el beneplácito del resto de exregidores nacionalistas de la ciudad, entusiasmados con la nueva visión 'no exclusivista' y que debe dar audiencia a todas las sensibilidades, tanto a presos como a víctimas, entre otros".

"En UPyD éramos conscientes de que uno de las primeros objetivos del nuevo orden no podía ser otro que el emblemático Palacio de Aiete. Más allá de la obtención de la capitalidad de 2016, el proyecto de Aiete siempre fue desde UPyD una de las iniciativas, con sus ajustes necesarios, más aplaudidas del anterior alcalde pese a la hiperpropaganda personal de la que hizo gala", ha afirmado la dirigente de UPyD.

Por este motivo, ha reiterado su "indignación y repugnancia" por el hecho de que San Sebastián, "en vez de convertirse en referente de los Derecho Humanos en Europa, pueda transformarse en marco incomparable del dirigismo y la distorsión macabra de nuestra historia más reciente".

En esta línea, ha señalado que, mientras "se siguen inaugurando placas en recuerdo de las víctimas y represaliados por el franquismo", todavía "ninguna placa recuerda uno de los breves tempos de ilusión y libertad como la que debiera recordar la firma del Pacto de San Sebastián en agosto de 1930, con los valores más elevados de un primer republicanismo donostiarra ilustrado, regeneracionista, modernizador y cosmopolita, más acorde con la idea y proyección que nuestra ciudad debe dar al exterior".