El Gobierno vasco ha puesto en marcha la segunda campaña para detectar y sancionar a los ciclomotores que no se hayan sometido a la inspección técnica obligatoria, según ha informado el Departamento de Industria, Innovación, Comercio y Turismo.

Según datos proporcionados por el Ejecutivo vasco, el 65 por ciento de los ciclomotores registrados en Euskadi no se han sometido a esta inspección, pese a la obligatoriedad de realizarla.

A partir del este mes de agosto, se establecerán controles rigurosos para sancionar a todos aquellos conductores que debiendo haber sometido su ciclomotor a la correspondiente inspección no la hayan realizado.

Las multas con las que puede ser sancionado un vehículo que no haya cumplido la obligación de someterse a la ITV o que, habiéndose sometido, incumpla las condiciones técnicas que afecten gravemente a la seguridad vial alcanzan como mínimo los 200 euros.

Asimismo, el Gobierno está promoviendo actuaciones para concienciar a los propietarios de ciclomotores de la necesidad de someterse a este control. Para ello, se ha elaborado un tríptico que se ha distribuido entre los conductores de estos vehículos, así como en tiendas de ciclomotores y autoescuelas.

La primera campaña realizada el pasado verano ha provocado un aumento del 11,42 por ciento en el número de ciclomotores que han acudido a pasar la ITV durante este año.

Según los datos del Ejecutivo vasco, las víctimas de accidentes en los que están implicados los ciclomotores oscilan entre los 15 y 17 años y el 70 por ciento de los ingresados por estas causas permanecer bajo tratamiento toda su vida o por un largo periodo de tiempo.