El consejero de Obras Públicas y Vivienda de Cantabria, Francisco Rodríguez Argüeso, ha lamentado el "retraso" en la carretera Puentenansa-La Cohilla debido, según ha dicho, a "los errores de gestión de la anterior Consejería", que han "alargado las obras en tres años" ya que se iniciaron "sin la evaluación de impacto ambiental".

Rodríguez, que ha inspeccionado este martes la marcha de los trabajos con los técnicos, el director de Obras Públicas, José Francisco Sánchez Cimiano, y los alcaldes de Rionansa y Tudanca, José Miguel Gómez y Manuel Grande, respectivamente, ha recordado que su adjudicación se llevó a cabo en 2006 y que estaba previsto que finalizara en marzo de 2009.

El consejero ha criticado además la "falta de previsión" del anterior Gobierno, ya que se tuvieron que hacer "varios modificados" de las obras, de tal manera que de un presupuesto establecido de 11 millones se ha elevado a 17,7.

"Hay que mejorar este tipo de gestión y hacer un esfuerzo por el control del gasto del dinero público", ha reivindicado Rodríguez, que ha pedido disculpas a los vecinos de Rionansa, Tudanca y Polaciones por las "molestias" que este retraso les está produciendo y ha reconocido la importancia de esta carretera, que "aumentará la comodidad y seguridad".

Rodríguez Argüeso ha informado de que, en función de las condiciones meteorológicas del invierno, los técnicos esperan que la obra esté finalizada en el mes de mayo del año que viene. OBRAS

Las obras en este tramo, que tiene una longitud de 25 kilómetros, consisten en la mejora del firme y en el ensanche de la plataforma, que de los cinco metros existentes pasará a 6,20 metros en la mayor parte del trazado, contribuyendo así a la "seguridad" de la circulación. Además, en algunos casos incluirá un servicio peatonal con un carril añadido de 1,50 metros.

El tramo, que discurre por los municipios de Rionansa y de Tudanca, afecta a las carreteras CA-281 (Puentenansa-La Cohilla) y CA-860 (Cosío-San Sebastián de Garabandal).

Destacan los ensanchamientos de los puentes sobre el río Nansa y Vendul, en los puntos kilométricos 2,3 y 2,7, así como la ampliación del puente sobre la vaguada, en el punto kilométrico 13,2, todos de la CA-281.

Los dos primeros contarán con una anchura de 10,5 metros para permitir las correspondientes aceras y pretiles, mientras que el tercero se ampliará con una anchura variable, adaptándose a la geometría de la calzada.

Ampliación de la calzada

La calzada, que era de 5 metros, se ampliará desde Puentenansa y durante 4,2 kilómetros, a 6,20 metros de ancho, más un carril peatonal de 1,50 metros. Luego continuará con una anchura de 6,20 metros hasta el punto kilométrico 15,8, a partir del cual el ancho se ajustará a la carretera existente.

En el tramo de Cosío a San Sebastián de Garabandal, la calzada también mejorará su anchura, pasando de los 5 hasta los 6,20 metros, y en la travesía de Cossío está previsto disponer de una acera de ancho variable en los primeros 460 metros.

Las obras incluirán escolleras de hormigón y de mampostería en los puntos que así lo precisen, y en las travesías se instalarán luminarias con columnas de 10 metros de altura y lámparas VSAP de 250 watios, con una separación de 34 metros.

También está previsto restaurar tanto la señalización horizontal como la vertical de la carretera. Con respecto al firme, éste se mejorará en todo el tramo.