El rector de la Universitat de Lleida (UdL), Roberto Fernández, ha defendido este miércoles a sus profesores de los que ha dicho que sí cumplen los horarios de docencia en respuesta al informe de la Sindicatura de Cuentas.

Fernández, acompañado del vicerector de Personal Académico, Carles Capdevila, y del gerente de la UdL, Josep Maria Sentís, ha hecho estas declaraciones tras el informe de la Sindicatura, en el que ha analizado a 364 profesores, que apunta que el 69,5% no cumple las horas mínimas de docencia que le corresponden.

"Respetando el documento, discrepamos profundamente de algunas consideraciones del informe de la Sindicatura", ha aseverado Fernández.

El rector se desmarca de las consideraciones "que tienen un carácter interpretativo o aquellas que no tienen en cuenta la política general que siguen el conjunto de universidades catalanas y españolas o no contemplan normas legales de convenios colectivos vigentes".

Carles Capdevila ha insistido en que el profesorado cumple plenamente con la dedicación y el esfuerzo docente y de investigación que marca la legislación y que le encomienda la universidad.

Si bien el informe de la Sindicatura señala que una proporción muy elevada del profesorado no cumple con las horas docentes que fija el Real decreto de 898/1985, la UdL considera que este hecho no es en sí mismo negativo, pues no quiere decir que el profesorado no cumpla con su dedicación a la docencia y la investigación.

Capdevila ha agregado que la UdL ha elaborado una política de profesorado recogida en el Documento de Política de Personal Académico, que establece diferentes perfiles de profesorado teniendo en cuenta efectivamente que la actividad del profesor universitario no es reduce exclusivamente a la docencia, sino que además tiene que contemplar la actividad de investigación y en ocasiones de gestión.

Esta política de personal académico de la UdL permite que el profesorado que tiene una mayor dedicación a la investigación pueda hacer menos de las 240 horas de docencia que marca el decreto de 1985, y que es la referencia que ha considerado la Sindicatura de Cuentas.

Concretamente, el Documento de Política de Personal Académico de la UdL establece, ha afirmado el vicerector, que el profesorado con mucha actividad de investigación pueda hacer entre 100 y 120 horas de docencia anuales, mientras que el profesorado con menos actividad de investigación pueda hacer entre 360 y 400 horas docentes anuales.

El mismo decreto de 1985 ya señala —ha precisado Capdevila— que "los departamentos podrán reducir total o parcialmente la docencia de algunos de sus profesores para dedicarse más intensamente a la búsqueda y distribuir su docencia entre el resto de profesorado".