La Universitat de València (UV) ha puesto en marcha un plan de ahorro económico y energético que por primera vez incluye el cierre de sus instalaciones docentes y administrativas del 8 al 21 de agosto, a excepción eso sí, de las bibliotecas, los laboratorios de investigación con animales o cultivos de bacterias y los departamentos de registro. Con esta iniciativa la institución académica espera poder ahorrar unos 400.000 euros.

Así lo ha anunciado este martes el rector de la UV, Esteban Morcillo, durante un encuentro con los medios en el que ha comentado precisado que el acceso a todos los centros por parte del personal será posible, pero no funcionará el aire acondicionado o el servicio de limpieza. De este modo, se pretende ahorrar no sólo en consumo energético, sino también en limpieza, vigilancia y mantenimiento, excepto los servicios mínimos en cada caso.

El rector ha señalado que se trata de una iniciativa "experimental" para las dos semanas centrales de agosto que, si va bien, podría ampliarse a tres semanas en 2012 y valorarse alargar este período en los próximos cursos.

De hecho, no se trata de la única comunidad que cierra parte de sus infraestructuras en la época estival, ha asegurado, sino que es una tendencia en alza dentro de las políticas de ahorro que se están llevando a cabo en los últimos tiempos.

Así, prácticamente todo el campus de Tarongers menos la biblioteca, se cerrará durante la segunda y la tercera semana de agosto, junto a los despachos y aularios de las facultades de la avenida de Blasco Ibáñez y parte del campus de Burjassot. En este último será en el que más espacios continúen abiertos, dada la mayor cantidad de laboratorios con cultivos de bacterias y animalario que se ubican en él. También continuará plenamente abierto todo agosto el Parc Científic, el Jardín Botánico, y el Centro Cultural La Nau.

La Universitat de València lleva dos años ejecutando un exigente plan de ahorro energético, con objetivos más ambiciosos cada año.

Así, en los seis primeros meses de 2011, el ahorro global de energía eléctrica ha sido del 2,72%, pese a la entrada en funcionamiento de nuevos edificios, como la Facultad de Magisterio. Esta reducción ha supuesto un ahorro de más de 100.000 euros en el primer semestre.

Más importante porcentualmente ha sido la reducción del consumo de gas, que ha alcanzado el 11,42%, pero donde se han superado todas las previsiones ha sido en el ahorro de agua, que se ha reducido en el primer semestre de 2011 en un 15,18%. Esto significa que en seis meses la Universidad ha consumido 130.522.000 litros de agua menos.

El uso racional de le energía es una "práctica consolidada" en esta institución, que dispone además del mayor generador urbano español de paneles solares para la producción de energía eléctrica y que en la actualidad está instalando paneles solares térmicos, que aprovechan la energía calorífica del sol para producir agua caliente.

"legítimamente orgullosos" de la capacidad investigadora

Por otra parte, preguntado por el informe de la Universidad de Granada —dado a conocer este martes— que sitúa a la UV como la quinta mejor universidad de España en capacidad investigadora, Morcillo ha manifestado que "podemos estar legítimamente orgullosos como institución del resultado en los ranking" aunque ha advertido de que no hay que quedarse en la "autocomplecencia" sino tiene que ser un "estímulo para seguir mejorando".