Urkullu afirma que el pueblo vasco, al igual que el noruego, no está dispuesto a que "el extremismo" cambie su política

Destaca que el compromiso de los vascos "por la paz y los derechos humanos", y su rechazo a toda violencia, "es absoluto".

El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, ha afirmado que el pueblo vasco, al igual que el noruego, no está dispuesto a que "el extremismo" cambie su política, sus valores o su "modelo de sociedad abierta". Además, ha destacado que el compromiso de los vascos "por la paz y los derechos humanos", y su rechazo a toda violencia, "es absoluto".

En un artículo escrito en su blog, recogido por Europa Press, Urkullu recuerda "la masacre" de Noruega cometida "por alguien que también quiso convertirse en Dios por un día". "La intolerancia no conoce fronteras ni ideologías", ha recordado.

El líder jeltzale ha destacado que, tras producirse los crímenes en Noruega, expresó sus condolencias al embajador noruego, que le transmitió "el compromiso de todo un pueblo (el noruego), que no está dispuesto a aceptar que un acto de extremismo cambie su política, sus valores o su modelo de sociedad abierta".

En este sentido, Iñigo Urkullu asegura que los vascos tampoco están dispuestos a ello, no lo estuvo en 1936, con el alzamiento franquista y la guerra ciivil, "ni hoy en el siglo XXI", con la violencia de ETA.

El presidente del EBB recuerda, en su post, el 75 aniversario del bombardeo de la localidad vizcaína de Otxandio, en el que fallecieron más de 60 personas en la plaza Andikona. Este domingo se celebró un acto de homenaje a los fallecidos, en el que estuvo presente Urkullu.

El máximo representante del PNV destaca "aquella barbarie" y las familias "enteras" que fueron "masacradas por un dictador que se creía Dios". "Para que, además, tengamos que aguantar las interpretaciones que sobre el personaje hace la Real Academia de la Historia", asegura con indignación.

Rechazo a toda violencia

A su juicio, "los valores, como el acero corten, son inalterables por el tiempo". "Los valores de la sociedad vasca también, si ésta es su voluntad. Su compromiso por la paz y por los derechos humanos, y su rechazo a cualquier tipo de violencia, es absoluto", añade.

Además, considera que "la memoria" es necesaria "para profundizar en los valores característicos que han sido del pueblo vasco ante toda violencia y toda violación de los derechos humanos, confundiéndolos con la discrepancia ideológica y los derechos colectivos, sin tener en cuenta la persona y la voluntad de las personas".

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