A Rocío Jurado se lo detectaron en el verano de 2004 en la clínica Montepríncipe de Madrid, a la que acudió por un dolor en el abdomen. Ahí empezó un vía crucis de operaciones y quimioterapias.

Salvar a La Más Grande, como la conocen sus incondicionales, se convirtió en prioridad absoluta del clan Jurado. Ella dejó de cantar y en otoño viajó a Houston (EE UU) para tratarse en la prestigiosa clínica MD Anderson.

Un año después, cuando parecía que había recuperado fortaleza y se subía de nuevo a un escenario –en diciembre grabó un especial de TVE– regresó a los EE UU para una revisión. Al final estuvo hospitalizada durante dos meses.

Circo mediático

La salud de la Jurado se convirtió en un circo mediático, por los rumores y las peleas en el clan por controlar el flujo de la información.

Rocío volvió a España el 23 de marzo en un avión medicalizado. Tras unos días en la Montepríncipe, el pasado 8 de abril salió rumbo a su casa de La Moraleja.

Estaba muy delgada, pero sonriente. Sin embargo, un último revés de la enfermedad ha llevado a la cantante al hospital, donde ya lleva cinco noches ingresada.

El tumor de páncreas

El páncreas es la glándula que segrega la insulina que controla los niveles de glucosa (el azúcar en la sangre). Un tumor maligno en el páncreas es de los más difíciles de diagnosticar, ya que los síntomas aparecen cuando la enfermedad está en una fase demasiado avanzada. La localización del páncreas –tras el estómago– impide que los tumores pequeños sean detectados en revisiones rutinarias.

E clan de la chipionera

Su esposo: José Ortega Cano sólo se ha separado de su lado para ir a rezar por su salud.

Sus hijos y nietos: Rocío Carrasco ha estado desde enero siempre junto a su madre, con su novio Fidel Albiac. Los pequeños José Fernando y Gloria Camila, así como sus nietos Rocío y David la esperaban en casa.

Su hermano y el resto de la familia: El representante y hermano de la cantante, Amador, también viajó a Houston. Los familiares que se quedaron en Madrid no dejaron de ser asaltados por la prensa del corazón.