Este tipo de enseñanzas estaban reservadas exclusivamente a la Formación Profesional, aunque la Universidad apostó –hace ya cuatro años– por incluirlas en su oferta con el objetivo de educar a trabajadores capaces de competir en un mercado especializado. Actualmente, más de 300 alumnos compaginan asignaturas tan diversas como los idiomas o la legislación con otras específicas de cada rama, como las más de 200 horas de vuelo que completan los alumnos de Aviación Comercial antes de graduarse.

Otros estudios están más orientados para formar a técnicos superiores de control medioambiental y de calidad, mientras que los alumnos de Arquitectura de Interiores conforman la vanguardia del diseño.

Aunque no hay curso con tanta diversidad de salidas como el de Pedagogía Teatral: desde animador socio-cultural para la tercera edad hasta escenógrafo, dramaturgo o director de cine.