El Departamento de Empleo del Gobierno vasco ha remitido un informe al Ministerio de Trabajo en contra del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción proyectado por la multinacional ABB para sus plantas en el Estado español, entre ellas la de Galindo (Bizkaia). El Ejecutivo considera que la situación de la empresa y la del grupo al que pertenece no parecen "tan críticas como para adoptar una medida de extinción".

La resolución de este caso, al afectar a varias factorías repartidas por todo el Estado, corresponde a la Dirección General de Trabajo, dependiente del Ministerio de Trabajo, según ha recordado el Departamento de Empleo en un comunicado.

No obstante, el Gobierno vasco ha realizado varias consideraciones en lo referente a la planta de Galindo, en Trapagaran, en la que el ERE afecta 160 trabajadores. El Departamento de Empleo considera que el plan de reestructuración presentado por la empresa para la factoría vizcaína "resulta incompleto".

El Ejecutivo autonómico ha señalado que dicho proyecto presenta "una falta de información y de concreción respecto a la nueva actividad del centro Regional de Servicios (CRS) que prevé crear, su cuenta de resultados provisional y las necesidades de la plantilla".

"la más traumática"

Además, en el informe remitido al Ministerio de Trabajo se señala que la empresa "no entra a valorar otras medidas alternativas y opta por la más traumática". Entre esas alternativas, afirma el Departamento de Empleo, figuraría "una regulación de empleo en sus modalidades de suspensión o de reducción de jornada".

En opinión del Gobierno vasco, dichas modalidades "podrían ser adoptadas hasta la implantación efectiva de los nuevos centros", de forma que la empresa podría continuar con la fabricación de transformadores en la planta de Galindo, compatibilizando esta actividad con los nuevos proyectos "hasta que éstos fuesen una realidad o con mayores garantías de las que actualmente ofrecen". Todo ello, "teniendo en cuenta que la plantilla de ABB Galindo es joven y de gran calificación".

Por otra parte, manifiesta que "tampoco parece haberse previsto la posibilidad de sondear nuevos mercados internacionales que pudieran dar continuidad a los pedidos". En el informe se indica que esto se produce "a pesar de haber tenido ya clientes en áreas geográficas que se escapan del radio de acción del centro de Galindo y que demuestran la flexibilidad y capacidad de producción y adaptación de la planta vizcaína".

Asimismo, el Departamento de Empleo entiende que este ERE "no se presenta por causas económicas y se justifica en la disminución de pedidos de transformadores". El Ejecutivo advierte de que, no obstante, "la valoración de las causas debería hacerse también teniendo en cuenta los resultados obtenidos por la empresa en sus últimos ejercicios".

Por ese motivo, considera que ni la situación de la empresa ni la del grupo al que pertenece no parecen "tan críticas como para adoptar una medida de extinción".