La formación CDN, socia de UPN en el Gobierno foral, exigió la paralización del proceso de paz si se confirma "la motivación política" del incendio .

El secretario general de UPN, Alberto Catalán, aseguró que esta acción "pretende coaccionar y presionar a UPN y a toda la sociedad navarra, pretendiendo amedrentarles en un momento en el que Navarra continua siendo centro de atención".

Desde UPN de Barañaín se ha convocado una concentración para el próximo lunes frente al edificio siniestrado.

La junta de portavoces del Ayuntamiento de Barañáin (PSN, UPN, Aralar, Batzarre, C.I.Barañáin, CDN, EA y IUN-NEB) aprobó por unanimidad un escrito en el que se condena "este atentado de clara connotación política".

El presidente del PNV en Navarra, Jose Angel Agirrebengoa, señaló que "todas las acciones violentas merecen nuestra repulsa y nuestra condena" y resaltó que "en una sociedad democrática no cabe el recurso a la violencia para resolver ningún conflicto".

Un llamamiento a la cautela hizo también el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, hasta que se confirme plenamente la autoría del incendio, y de ser así, dijo, "habría que plantearse una exigencia clara de que la tregua lo es en todos los frentes", incluida la lucha callejera.

Ezker Batua (EB), a través de su diputado autonómico, Oskar Matute, consideró que el incendio intencionado es un "obstáculo para el avance en el cese definitivo de la violencia y el inicio de un diálogo resolutivo", aunque añadió que lo sucedido "no puede hacer perder la ilusión ni la esperanza en el cese definitivo de la violencia".

En nombre de los socialistas vascos, el portavoz del PSE-EE, Rodolfo Ares, emplazó a la ilegalizada a Batasuna a desmarcarse "claramente" de este ataque, si se comprueba que está vinculado a la "kale borroka", lo cual sería algo "gravísimo".

Para el secretario general del PP del País Vasco, Carmelo Barrio, el incendio confirma que "los terroristas tienen a Navarra en su punto de mira", recordó el supuesto envío de una carta de extorsión a un empresario navarro y reclamó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que "no negocie" con los terroristas y recupere la "expresión de buscar la derrota de ETA".

En la misma línea se pronunció el presidente de la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN), José Manuel Ayesa, quien opinó que si se demuestra que el ataque de hoy está relacionado con la violencia callejera quedaría patente de forma fehaciente "cuál es la voluntad de la banda terrorista y sobre todo la credibilidad que merece".

Un juicio similar expresó la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), para la que los "lamentables hechos" muestran "la nula credibilidad de los asesinos de ETA" y, de nuevo, añadió, el entorno de la banda armada ha vuelto a demostrar que no entiende más que el lenguaje del terror, del miedo y del crimen".

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