El PP de León ha decidido revocar la decisión del anterior equipo de Gobierno municipal PSOE-UPL de cambiar la ubicación del rastro dominical, de manera que a partir de este domingo volverá a su anterior emplazamiento, en Papalaguinda, "de donde nunca debió salir".

Así lo ha expresado este martes el portavoz del PP en el Ayuntamiento de León, José María López Benito, quien recordó que en la anterior legislatura se justificó el traslado del rastro a la zona de Clarés en la actuación que se acometería en el paseo de Papalaguinda con cargo a los fondos del Plan E, donde finalmente, "en un alarde de improvisación", el ex alcalde, Francisco Fernández, se "sacó de la chistera" la creación del parque de Pocoyó, que ya ha sido reubicado.

Al no acometerse esa gran reforma de Papalaguinda y trasladarse el parque de Pocoyó, lo "razonable" para el PP es que el rastro regrese a su ubicación anterior, una decisión que está "en sintonía" con el sentir mayoritario de los leoneses. "Es una decisión coherente y consecuente con nuestras ideas y nuestro programa electoral", recalcó.

Desde el próximo domingo día 24, el rastro volverá a estar en Papalaguinda, donde además se realizarán otras medidas encaminadas a mejorar la limpieza y el cuidado del entorno, así como a garantizar el control de los puestos, implementar la vigilancia en la zona y controlar el cumplimiento de la normativa vigente.

Por su parte, la edil de Comercio y Consumo, María José Álvarez, aseguró que la reubicación del rastro no es un traslado "caprichoso", sino una decisión "meditada y consensuada", tras consultar con los propios ciudadanos sobre el emplazamiento más adecuado, así como con los portavoces de los colectivos afectados, con la Federación de Asociaciones Vecinales y con la Asociación de vecinos y de comerciantes afectados.

REQUISITOS

"Ha habido un total y absoluto apoyo", reiteró y detalló los requisitos que tendrán que cumplir a partir de ahora los vendedores del rastro dominical, entre los que se encuentra el cumplimiento de la normativa vigente en materia de venta ambulante, que supone estar dados de alta en el régimen de la Seguridad Social que corresponda o estar al corriente del pago de sus obligaciones con la hacienda pública, entre otros. Los comerciantes deberán comprometerse por escrito a mantener estos requisitos.

Además, únicamente se podrán vender los productos autorizados, de manera que estará prohibida la venta de falsificaciones o de productos sobre los que no se pueda justificar la procedencia mediante albarán o factura.

Por otra parte, será de obligado cumplimiento el mantenimiento del orden, la limpieza y la higiene, por lo que los puestos de venta deberán quedar vacíos y limpios al cierre del mercado y habrá que utilizar los contenedores de reciclado.

María José Álvarez apuntó que el Ayuntamiento de León será "inflexible" en el cumplimiento de estos requisitos y para ello se establecerá una comisión de seguimiento que se reunirá una vez al mes.

El rastro se estructurará en una calle con dos filas paralelas para permitir el paseo y la circulación de la Policía y el Servicio de Emergencias. En total, podrán asentarse 400 puestos con la misma disposición que tenían antes del traslado a Clarés y el horario será de 10.00 a 15.00 horas.