El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha alertado este lunes de que España está "perdiendo el tiempo" porque el Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero está "en tiempo de descuento" y no se encuentra "en condiciones de generar confianza". A modo de ejemplo, el líder popular se ha referido a la situación de la prima de riesgo, que ya roza los 370 puntos básicos, lo que "encarece" las opciones de financiarse.

"Eso se debe a los problemas que hay fuera, pero también a la desconfianza que genera la economía española", ha esgrimido Rajoy, en el marco de una reunión que mantuvo en Pontevedra con presidentes de diputaciones, cabildos y consells, y en la que también participaron el jefe de filas del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo; la vicesecretaria popular de Organización y Electoral, Ana Mato; y el vicesecretario popular de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, entre otros dirigentes de la formación.

Rajoy ha defendido que es "prioritario" crear confianza, algo que, a su juicio, "no es posible" con el actual Ejecutivo estatal, y a falta de tres días para que se reúnan los jefes de Estado y de Gobierno de los países de la zona euro para abordar la situación de Grecia, ha reclamado que de este "importante" encuentro salgan "certidumbres", así como "decisiones claras y entendibles".

"Es muy importante tratar los temas de Grecia y de los demás, me gustaría que de ahí saliesen certidumbres, decisiones claras y entendibles", ha proclamado, convencido de que Europa debe enviar "un mensaje claro" al resto del mundo.

Con todo, ha señalado que "más importante" es que el Ejecutivo central tenga en cuenta que, aunque hay problemas "fuera", los de España "serán mayores" si "no se hacen los deberes". "Y aquí no se han hecho los deberes, se ha gastado mucho más de lo que se debía, y cuando las cosas se hacen mal, al final se paga", ha subrayado.

"pedir la opinión" de los españoles

En el polo opuesto, ha enfatizado que, "cuando las cosas se hacen bien, se tiene éxito" y se ha mostrado convencido de que la situación del país "tiene arreglo". "El problema no son España y los españoles", ha garantizado, tras constatar que en este país "se puede" con un Gobierno que "mire al futuro" y que haga las "reformas" que tiene que hacer "con coraje y determinación".

Así, ha garantizado que, cuando Rodríguez Zapatero "se decida a pedir la opinión" de los españoles, "todo cambiará" y el país volverá a estar donde debe hacerlo: "entre los mejores".