Libreros andaluces inician acciones legales contra los centros que venden y gestionan "fraudulentamente" libros de texto

La Federación Andaluza de Libreros (FAL), entidad perteneciente a la Confederación Española de Libreros (Cegal), ha advertido a los centros educativos de la comunidad y a sus respectivas Ampas que están iniciando acciones legales frente a aquéllos que "fraudulentamente vendan o gestionen los libros de texto y material escolar directamente".

La Federación Andaluza de Libreros (FAL), entidad perteneciente a la Confederación Española de Libreros (Cegal), ha advertido a los centros educativos de la comunidad y a sus respectivas Ampas que están iniciando acciones legales frente a aquéllos que "fraudulentamente vendan o gestionen los libros de texto y material escolar directamente".

Según ha detallado la FAL a Europa Press, los libreros andaluces están comunicando a las Delegaciones Provinciales de la Consejería de Educación los casos de "incumplimiento" de la normativa de gratuidad de libros de texto que la propia Junta de Andalucía establece y en la que "se indica claramente que no está permitida la gestión de los cheques-libros por parte de Ampas, asociaciones o los propios centros educativos que puedan obtener beneficios derivados de esta gestión destinados a un gasto no distinto al programa de gratuidad de libro".

En esta misma normativa, recuerdan los libreros, se insta a los servicios de la Inspección educativa de cada provincia a "requerir la información necesaria de los centros educativos para evitar malas prácticas en este sentido", evitando que "las ofertas comerciales o beneficios en la utilización de los cheque-libros repercuta directa y exclusivamente en el centro educativo".

Ante ello, la FAL también está informando de estas cuestiones a los centros de enseñanza que presuntamente incumplen la normativa y recordándoles que las citadas instrucciones de la Consejería "dejan muy claro cómo deben de proceder los directores de los centros docentes y cuáles son las obligaciones y derechos de los beneficiarios para participar en el Programa de Gratuidad".

No en vano, tal y como argumentan los libreros, la propia Ley de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas define claramente el concepto de librero para evitar prácticas como ésta y la Ley de Defensa de la Competencia también regula "qué se entiende por prácticas comerciales que restringen la competencia, creándose un órgano específico de control de concentraciones que resuelve si una operación mercantil tiene naturaleza concentrativa".

En este sentido, la FAL ha anunciado que intervendrá "también contra las prácticas de determinados colegios concertados que están ofreciendo la venta de los libros de texto y material escolar directamente a los padres de los alumnos sin que conste que hagan las necesarias declaraciones fiscales y liquidación de IVA e impuestos correspondientes". "Esta actividad, en desleal competencia, causa serios problemas en las librerías que sí atienden debidamente sus obligaciones tributarias y pago de nuestros impuestos", añaden.

Por último, los libreros han insistido en la importancia de "proteger y potenciar" la existencia de la red de librerías en Andalucía como espacios de cultura, diseminada por toda nuestra geografía. Ante todo, concluyen, porque "precisamente las ilegalidades mencionadas ponen en peligro la existencia de esa red librera y de los puestos de trabajo que representan".

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