La portavoz del PP-A, Rosario Soto, ha acusado al PSOE-A de dar "un golpe de Estado al municipalismo" y, en concreto, al "resultado de las elecciones del pasado 22 de mayo" impulsando una modificación normativa que establezca la incompatibilidad entre el cargo de diputado autonómico y el de alcalde o presidente de diputación. Esta medida ha sido aprobada este jueves por el grupo de trabajo sobre transparencia y calidad democrática del Parlamento andaluz con el apoyo de IU-CA y el rechazo del PP.

En rueda de prensa en Sevilla, Soto ha mostrado su "sorpresa" por esta propuesta porque con ella el PSOE-A "está intentando cambiar el resultado de las elecciones municipales" y apagar, al mismo tiempo, "la voz de los municipios en el Parlamento de Andalucía". "Hoy, que el PSOE-A pierde las elecciones del 22 de mayo, hoy, pretende cambiar las reglas del juego", ha criticado.

En este sentido, ha considerado que la propuesta de los socialistas andaluces para fomentar la transparencia y la calidad democrática en Andalucía, "lejos de ser un impulso a la democracia, es un retroceso democrático" con el que intenta "atacar al municipalismo y a los representantes de los pueblos" en la Cámara andaluza. Por contra, ha lamentado que el PSOE-A no haya presentado "ninguna otra propuesta" y que, por contra, "siga manteniendo las cesantías o los gastos de los altos cargos del Gobierno".

Asimismo, el PP-A entiende que esta medida del PSOE-A responde a un "pacto social-comunista" con el que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, pretenden "engañar" a los andaluces. "Han aprovechado una doble cuestión: Valderas ha entregado la cabeza de Sánchez Gordillo y Griñán pretende expulsar del Parlamento a los alcaldes del PP-A; ésta es la propuesta antidemocrática que se ha materializado del pacto entre socialistas y comunistas", ha argumentado.

Con todo, la portavoz del PP-A ha confiado en que los andaluces "no se van a dejar engañar" por los socialistas y por los comunistas porque lo que quiere el pueblo es "el cambio de política" y la llegada de "una transparencia real y de una austeridad real", algo que, a su juicio, no hace el Gobierno andaluz porque, si lo hiciera, hubiera reducido, por ejemplo, el número de Consejerías del Ejecutivo regional o hubiera eliminado al 50 por ciento de los delegados provinciales, tal y como ha pedido su grupo parlamentario.

Al hilo, Soto se preguntó "cómo es posible que con los niveles de paro que hay en Andalucía, ayer Griñán se ratificara en que no va a reducir el número de consejerías, un ejemplo básico de austeridad". "Esta actitud del Gobierno hace patente la falta de austeridad y la falta de transparencia del PSOE-A", concluyó.