El número de explotaciones agrarias censadas se situó en 989.796 en 2009, lo que supone una reducción del 23,2% respecto a las registradas en el anterior censo agrario, que tuvo lugar en 1999, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La superficie agrícola utilizada (SAU) disminuyó en más de 2,4 millones de hectáreas (un 9,2%) en el mismo periodo, hasta situarse en 23,75 millones de hectáreas. Este descenso se produjo tanto en las tierras labradas (-8,43%) como en las tierras para pastos permanentes (-10,58%).

Con estos datos, el tamaño medio por explotación se incrementó un 18,5% en esos diez años, con aumentos en todas las comunidades autónomas.

Por su parte, las unidades de trabajo-año por explotación (UTA media) registraron un incremento del 7,3% como consecuencia del proceso de concentración y especialización de las explotacones que se ha producido entre 1999 y 2009.

Se reducen las explotaciones ganaderas.

En el caso de la ganadería, el número de explotaciones de cada especie de ganado se redujo en la década analizada, con mayores descensos en las explotaciones de porcino (-61,4%), aves (-59,6%) y equinos (-52,4%). Por su parte, el número de explotaciones de caprinos y bovinos disminuyó más de un 40% y el de ovinos, un 35,6%.

No obstante, en el periodo intercensal se produjo un aumento del número medio de cabezas por explotación en todas las especies de ganado, pero especialmente en porcino (190%), en las explotaciones avícolas (173%) y en las de equinos (128%).

Entre los años 1999 y 2009, el número de cabezas se incrementó en el ganado porcino (+12,3%), avícola (+10,7%) y equino (+8,7%), mientras que se redujo en el ganado ovino (-20,8%), caprino (-13,3%) y bovino (-8%).