El secretario de la Federación Empresarial Toledana (FEDETO), Manuel Madruga, se ha mostrado partidario de la desaparición del Consejo Económico y Social, como ha propuesta la presidenta regional, María Dolores Cospedal, alegando que si es un organismo "caro, pues que desaparezca; las empresas llevamos aplicando medidas de austeridad desde hace tres años y medio".

Madruga ha precisado que si la propia administración regional "está empezando a ser austera, pues ha reducido en un 60 por ciento los altos cargos, y pide austeridad a los demás, hagámosla caso".

De este modo se ha pronunciado Madruga, a preguntas de los medios tras firmar un convenio de colaboración, sobre la polémica surgida en torno a la suspensión del pleno que el CES iba a celebrar la pasada semana.

Dicho esto, ha admitido que los empresarios tienen la culpa "total y absoluta" de que se desconvocara ese pleno. Así, Madruga ha explicado que los sindicatos CCOO y UGT convocaron el pleno sin contar con los empresarios, quienes manifestaron su intención de no asistir al pleno e instaron a desconvocarlo por no estar de acuerdo con el planteamiento.

Así, los empresarios adoptaron esta postura porque si el Gobierno de Maria Dolores de Cospedal está pidiendo austeridad y está "dando ejemplo" aplicándola a su propio Ejecutivo, "nosotros también nos la debemos aplicar".

Madruga ha indicado que además "intentamos trasladar a todos los demás miembros del CES que la desaparición de este organismo es un batalla que ya ha pasado, pues la decisión ya está tomada".

Guerra de trincheras

Es por ello que ha respaldado las palabras del presidente de CECAM y vicepresidente del CES, Ángel Nicolás, que ha afirmado que el Gobierno regional ha expresado su voluntad de acabar con este organismo, preguntando "qué sentido tiene que nos metamos en una guerra de trincheras de algo que va a desaparecer".

El representante de los empresarios toledanos ha insistido en que es al Gobierno regional al que compete crear otro espacio de diálogo con los agentes sociales, "para seguir discutiendo lo que sea de interés económico y social. Y si ese marco no tiene coste, pues mejor".

Por último, Manuel Madruga ha asegurado que le gustaría que ese nuevo espacio de debate fuera "lo más plural posible" y que el cauce del diálogo social se mantuviera con "los mismos protagonistas".