La Cámara de Comptos apuesta por introducir "una política de subvenciones más homogénea" en el ciclo de educación infantil 0-3 años que "premie la eficiencia de los centros que mejor gestionen los recursos".

Un informe del órgano fiscalizador critica "la coexistencia de subvenciones concedidas mediante convocatoria pública con otras nominativas, como consecuencia de enmiendas parlamentarias" y recomienda "evitar la inclusión de partidas nominativas en los presupuestos cuando existen otras para convocatorias generales".

La Cámara de Comptos ha publicado un informe sobre la situación del ciclo de enseñanza infantil 0-3 años, que cuenta con 178 centros en Navarra de los que 90 son de titularidad municipal, 8 están gestionados por el departamento de Asuntos Sociales y 80 son privados. En total, los centros públicos ofertan algo más de 6.000 plazas y los privados 3.800.

El índice de cobertura de estos centros depende de la zona geográfica, siendo la Comarca de Pamplona la que cuenta con la mejor cobertura sobre la demanda potencial de este servicio, mientras que la Sakana y la zona del Bidasoa son las que presentan un menor índice.

Además existen las denominadas 'Casas amigas', como recurso de conciliación dependiente del departamento de Asuntos Sociales. Son 22 casas, agrupadas en dos entidades, en las que se atiende a alrededor de 100 niños.

La creación de escuelas infantiles públicas se realiza mediante la suscripción de convenios entre el departamento de Educación y los ayuntamientos interesados, correspondiendo a estos últimos la titularidad de los centros.

En el caso de las escuelas dependientes del departamento de Asuntos Sociales, sus fondos salen de los presupuestos de dicho departamento. Las tarifas que abonan las familias las aprueba el departamento de Educación mediante orden foral y se sitúan, para la jornada completa, entre los 213 euros mensuales y los 17, según la renta de las familias. A ello hay que añadir el comedor en el caso de que se utilice, cuya tarifa se sitúa entre los 95 y los 52 euros mensuales.

El informe indica que entre los años 2005 y 2010 el departamento de Educación, para las escuelas que subvenciona, ha destinado 74 millones para el ciclo 0-3 años, de los que 45 corresponden a gastos de funcionamiento, 23 millones a obras y 5,5 millones a equipamiento.

La Cámara de Comptos ha realizado un análisis de la gestión del ciclo en el curso 2009-2010, mediante un muestreo a 17 centros en los que había 2.348 niños y niñas matriculados en 224 unidades. En cuanto a los centros municipales, el gasto por niño y año es de 5.000 euros y el gasto por unidad de 58.000. En el caso de los centros con gestión indirecta, la media es inferior, no llegando en ningún caso a los 4.000 euros por niño y año.

Los 8 centros dependientes del departamento de Asuntos Sociales tienen unos gastos (de gestión más comedor más necesidades educativas especiales) con una media de 81.400 euros por unidad y 8.000 euros por alumno y año.

Según el informe, "la actividad se desarrolla, en general, de conformidad con la normativa vigente", aunque critica "la coexistencia de subvenciones concedidas mediante convocatoria pública con otras nominativas, como consecuencia de enmiendas parlamentarias".

Además, el informe señala "las dificultades que pueden darse para que todos los centros actualmente existentes queden autorizados al terminar el actual periodo transitorio".

La Cámara de Comptos recomienda, entre otras cuestiones, que "se intente equilibrar la cobertura de las necesidades del ciclo O-3, homogeneizando la situación de las diferentes zonas geográficas".

También considera "oportuno" implantar un sistema de costes e indicadores de gestión para conocer el coste anual por plaza y categoría de niño atendidos y, en consecuencia, la financiación necesaria.

Comptos apunta que "ello permitiría una política de subvenciones más homogénea que premie la eficiencia de los centros que mejor gestionen los recursos". Igualmente, recomienda "evitar la inclusión de partidas nominativas en los presupuestos cuando existen otras para convocatorias generales" y establecer un plan de actuación ante la posibilidad de que al acabar el periodo transitorio queden centros sin autorizar.