Un pequeño grupo de 'indignados' y el sindicato CSI se han manifestado a este miércoles a las puertas del Hotel de la Reconquista de Oviedo para protestar y mostrar su oposición al proceso de lo que han denominado "privatización de Cajastur".

Lo han hecho coincidiendo con el inicio de la asamblea general que se celebra desde las 17.00 horas y en la que se someterá a votación la fusión entre Cajastur Caja Cantabria y Caja Extremadura.

En el caso de los indignados —un escaso grupo de algo más de una decena de personas— la protesta ha tenido lugar en silencio y tan sólo portando una pancarta en la que se podía leer "No somos mercancía en manos de políticos y banqueros".

Por su parte, los manifestantes convocados por el sindicato CSI, prefirieron recibir a los consejeros entre gritos de protestas como "La privatización es robo y corrupción"; "No hay pan para estos chorizos" o "Por una caja al servicio de Asturias".