Los afectados por las obras del intercambiador de Sagrera/Meridiana, que ha dejado sin servicio temporalmente –del 7 al 17 de abril– cuatro estaciones de la L1 del metro, entre Clot y Fabra i Puig, ya han protestado. Se quejan de los autobuses-lanzadera que, si van muy llenos, no paran en Navas y Sagrera y de las aglomeraciones en Fabra i Puig y Clot para acceder de nuevo al metro.Ayer tuvieron que ser los pasajeros, airados, quienes obligaron a un conductor que realiza el servicio alternativo a parar entre el Clot y Navas. «Hicimos la llamada anticipada, pero no paró», explica María Luisa Peñalba. El pasaje, indignado, presentó su queja. «No nos dio ninguna explicación», afirma Peñalba.
Para TMB es un caso aislado y «se trató de un fallo humano» atribuible a una confusión del conductor.
La compañía lamenta que el usuario, cuando desembarca del bus para acceder al metro, esté obligado a hacer cola para pasar otra vez el billete. «No podemos hacer nada al respecto», dicen.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios