La pequeña María Isabel, de nueve años de edad, se debate entre la vida y la muerte desde el pasado viernes cuando le cayó en la cabeza un enorme columpio durante una excursión en Navalcarnero (Madrid). Ingresada en el Hospital 12 de Octubre desde entonces, su estado es crítico.

Néstor y Alexandra, residentes en Valmojado (Toledo), relatan en declaraciones a Europa Press Televisión, que la pequeña estaba muy emocionada ese día puesto que se iba de excursión con sus compañeros de cuarto curso de primaria a pasar el día en Navalcarnero. "Mi niña se fue bien al viaje y ahora se debate entre la vida y la muerte. Roguemos a Dios que sea la vida", ha relatado la madre desde el Hospital 12 de Octubre.

Hasta allí fue trasladada María Isabel en helicóptero tras producirse el incidente. Alexandra cuenta que estaba en la celebración de la graduación infantil de su hija menor cuando el jefe de estudios le informó de lo ocurrido y desde entonces no se quiere separar de su hija, ingresada en la UCI porque quiere que "cuando despierte" sea a su madre "lo primero que vea".

"Yo sólo le pido por mi niña, la estoy esperando. El momento en que ella despierte voy a estar ahí para darle todo mi cariño y que ella me de todos sus abrazos y que me diga lo que me quiere porque además de ser su madre soy su mejor amiga y por eso para mi esto es un shock; no me lo creo todavía", lamentó Alexandra visiblemente emocionada.

Tanto Néstor como Alexandra han tenido palabras de agradecimiento al equipo médico del hospital que está tratando a su hija así como a los compañeros del colegio Santo Domingo de Guzmán. A todos ellos les piden que "recen" en nombre de la menor. "Sé que mi hija se va a recuperar, el próximo 3 de julio es su cumpleaños, cumple diez añitos. El médico nos dice que no hay mejoría pero hoy cuando le han dado crema la enfermera dice que movió un poco la pierna pero que no nos hagamos ilusiones", ha explicado el padre.

Preguntados por a quien corresponde la responsabilidad de lo ocurrido, los padres reconocen que "ahora mismo" no piensan en buscar culpables pero aseguran que el tema ya está en manos de su abogado quien "se va a encargar de todo". "Espero que a nadie le pase lo que a nosotros. Lo estamos pasando muy mal. Las autoridades tienen que velar por estos juegos infantiles porque hoy es mi hija pero mañana puede ser cualquiera", explica Néstor.