Domínguez (PP) asegura que la manifestación de ayer "fue de todo menos pacífica"

El concejal de Relaciones con los Medios del Ayuntamiento de Valencia, Miquel Domínguez, ha afirmado que la manifestación del 15M de este domingo "fue de todo menos pacífica porque hubo bastante gente que actúo con violencia verbal y con amenazas contra la alcaldesa, Rita Barberá".

El concejal de Relaciones con los Medios del Ayuntamiento de Valencia, Miquel Domínguez, ha afirmado que la manifestación del 15M de este domingo "fue de todo menos pacífica porque hubo bastante gente que actúo con violencia verbal y con amenazas contra la alcaldesa, Rita Barberá".

Domínguez, se ha expresado de esta manera en un comunicado en contestación a la delegada del Gobierno, Ana Botella y al secretario general del PSPV, Jorge Alarte, sobre la manifestación de este domingo y lo sucedido frente a la casa de la alcaldesa, considera "bochornoso que la delegada del Gobierno no sepa que la violencia verbal es un hecho violento e intimidatorio y más aún ante un domicilio particular".

En su opinión, "la libertad de expresión nunca debe ejercerse de forma fanática e intimidatoria, y eso es lo que hicieron ayer bastantes manifestantes del colectivo 15M", ha subrayado.

Domínguez, ha condenado los hechos ocurridos ayer en Valencia "porque "malintencionadamente la manifestación del colectivo 15M se desvío del recorrido que tenía autorizado para pasar por delante del domicilio de la Alcaldesa con el único fin de insultarla y amenazarla con violencia verbal y con pintadas en las que le deseaban la muerte."

De esta manera, ha afirmado que frente al domicilio de la alcaldesa "han aparecido pintadas en las que se puede leer: 'Muérete Rita' y 'Muérete'. Es una "gravísima irresponsabilidad que los manifestantes actuaron ayer con total impunidad y que la Delegación del Gobierno les permitiera salirse del recorrido autorizado de la manifestación para de manera violenta insultar y amenazar a la alcaldesa", ha agregado.

En opinión del Domínguez, "es muy preocupante, y demuestra la poca catadura moral que tienen y su falta de principios democráticos, que la Delegada del Gobierno, Ana Botella y el portavoz parlamentario del PSPV, Jorge Alarte, en lugar de condenar estos comportamientos violentos, digan que ayer todo transcurrió con normalidad y sin incidentes violentos."

"Es gravísimo que amenacen, insulten y falten al respeto a la puerta de su casa a cualquier ciudadano, y menos a quien ha sido elegida democráticamente por la gran mayoría de valencianos como alcaldesa de la ciudad", ha afirmado Domínguez, para proseguir señalando que "la libertad de expresión es un derecho fundamental que siempre hay que respetar, pero no las amenazas, los insultos y la violencia verbal".

El concejal de Seguridad Ciudadana se ha preguntado si la actitud de la delegada de Gobierno y del secretario general del PSPV sería la misma si el amenazado e insultado no fuera la Alcaldesa Rita Barberá". "Todos los partidos hemos condenado y lamentado lo que le sucedió al senador Joan Lerma y, sin embargo, Ana Botella y el Jorge Alarte hoy han dado una imagen deplorable tapando y justificando a los violentos".

Domínguez se ha mostrado "muy sorprendido porque la delegada del Gobierno, que les permitió un cambio de recorrido ilegal, no conozca que la violencia verbal es un hecho violento e intimidatorio, más aún cuando se ejerce sobre una persona ante su domicilio particular y ante los vecinos del edificio".

Para Miquel Domínguez, "el incidente se produjo y lo sufrió la alcaldesa y los vecinos de su edificio, y no caben excusas para una responsable del Gobierno que, en un día como el domingo, en que había convocada una multitudinaria manifestación en toda España, se despreocupó totalmente de la seguridad que era su obligación, mientras delante de la casa particular de la alcaldesa se proferían y vociferaban todo tipo de insultos, ofensas e improperios".

"Su negligencia ha provocado un incidente importante y ha dejado ver cuál es su escala de valores al frente de su cargo público", ha resaltado.

En cuanto a las manifestaciones de Jorge Alarte, Miquel Domínguez ha hecho notar que "si para Alarte no es nada violento ni censurable violar la intimidad de una persona yendo a insultarla a su domicilio, es posible que sea debido a su concepción de la democracia está tan atrofiada como su moral política, que debe andar por los suelos"

Por último, ha subrayado que "la libertad de expresión nunca debe ejercerse de forma fanática e intimidatoria, y eso lo que hicieron ayer muchos manifestantes del colectivo 15M".

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