CajaGranada lamenta la "disfunción" en la Ley de Cajas al recoger que será la única caja en adaptar órganos

Reconoce que las cajas "tienen parte de culpa" y han hecho las cosas "mal" y lamenta que las competencias quedan afectadas con la reforma
Antonio Jara, presidente de CajaGranada
Antonio Jara, presidente de CajaGranada
EUROPA PRESS
Antonio Jara, presidente de CajaGranada

El presidente de CajaGranada, Antonio Jara, ha lamentado la "singularidad disfuncional" que recoge la reforma de la Ley de Cajas de Ahorros andaluza, al recoger que la entidad granadina "deberá ser la única caja andaluza obligada a adaptar ya sus órganos de gobierno a la nueva norma" y ha demandado una moratoria para que se aplace dicha adaptación "al momento en que deba producirse una renovación parcial de órganos de gobierno".

En su intervención en comisión de Economía del Parlamento andaluz para valorar el proyecto de ley por el que se modifica la Ley de Cajas de Ahorros de Andalucía, Jara valoró de forma positiva las líneas generales del texto normativo andaluz, donde "se respeta el marco de distribución competencial convenido, dando cumplimiento a las previsiones del Estatuto de Autonomía" y considera una "buena opción" que el decreto ley andaluz haya "interiorizado" los distintos modelos de organización de las cajas que se regulan en real decreto ley estatal.

Además, también ha valorado la presencia equilibrada de hombres y mujeres en las entidades y las exigencias sobre conocimiento, experiencia, honorabilidad.

No obstante, tras destacar que CajaGranada "fue la primera entidad en adaptar sus estatutos y reglamentos a la nueva ley" ha recordado que la caja granadina se halla inmersa en un proceso de integración "complejo" mediante un Sistema Institucional de Protección (SIP) y la creación de Banco Mare Nostrum (BMN).

Ha indicado en ese sentido que, en esa reestructuración, la caja "se está sometiendo al marco jurídico definido por el legislador estatal y respondiendo a requerimientos insistentes y compulsivos del Banco de España, con importantes consecuencias y exigencias", a lo que se suma "una nueva exigencia introducida por el decreto ley andaluz de que nuestra entidad deba adaptar sus órganos de gobierno a lo previsto en la norma en el plazo de dos meses siguientes a la aprobación y adaptación de sus estatutos".

Jara ha lamentado que esa exigencia sobre los períodos transitorios, recogida en una disposición adicional, "no se hace para ninguna otra entidad andaluza, sólo será de aplicación para CajaGranada", lo cual a su juicio, un trato "diferenciador hacia nuestra entidad", lo cual constituye "una singularidad claramente disfuncional, que se suma a la reestructuración interna donde debemos cubrir las exigencias de capitalización impuesta por el legislador estatal y a la vez encarar la adaptación de nuestros órganos de gobierno que nos exige la adaptación autonómico".

"No nos gustaría ser tan singular", ha agregado Jara, quien ha indicado que "la integración mediante SIP es una integración que merece un trato idéntico al tratamiento dado a las operaciones mediante fusión", tras lo que ha lamentado que el decreto ley andaluz "nos da una posición singular, excepcional y claramente disfuncional".

Por ello, ha demandado que el decreto ley permita que esa renovación "quedara pospuesta mediante una disposición transitoria al primer momento en que se deba producir una renovación parcial de órganos de gobierno" y así "no añadir elementos de dificultad a una entidad andaluza en un momento de reestructuración del sistema".

Por otro lado, Jara además cree que se debería eliminar el recurso al silencio administrativo negativo contemplado en el proyecto de ley, al ser "una figura obsoleta y regresiva, y no tiene sentido volver a ello".

"parte de culpa"

El presidente de CajaGranada ha reconocido que las cajas de ahorros "han tenido parte de culpa" en la crisis financiera con acciones "poco edificantes y muchas de ellas censurables", de forma que, a su juicio, las cajas han hecho las cosas mal, pero no las han hecho peor que otros operadores del sistema financiero".

De esta forma, ha lamentado que la imagen pública de las cajas "sufre un marcado y notable acoso y el daño causado a las entidades resulta a todas luces desproporcionado", de forma que "las cajas no pueden ser el problema, cuando hemos resuelto muchos problemas".

Competencias autonómicas "gravemente afectadas"

Por otro lado, ha destacado la importancia de la reforma de cajas andaluza "para el desarrollo y buena marcha de nuestro sistema financiero, sujeto a duros ajustes y continuos requerimientos y turbulencias externas y sometido a una profunda reestructuración".

No obstante, ha lamentado que "en poco más de año y medio se hayan dictado a nivel nacional cuatro reales decretos leyes, que se han venido mostrando insuficientes", de forma que, en su opinión, "ese tejer y destejer el marco normativo y regulatorio ha supuesto una profunda revisión del modelo fundacional de las cajas".

Así, en su opinión, la reforma normativa estatal "no es una reforma cosmética ni estética sino profunda del modelo fundacional de que supone una inversión clara del modelo e implica cierto riesgo para la permanencia de ese modelo". "Cuatro reales decretos leyes afectan seriamente al sistema financiero, acometiéndose reformas y la reestructuración del sistema financiero de forma acelerada y algo desordenada".

Asimismo, ha lamentado que, esta reestructuración estatal "está afectando al sistema de distribución de competencias en el ámbito financiero, competencias previamente convenidas y estatutariamente refrendadas entre el Estado y las comunidades autónomas, de forma que han quedado gravemente afectadas".

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