El hijo de Gallardón condena la protesta ante su casa y advierte contra el radicalismo

  • Uno de los hijos del alcalde ha escrito una carta en la que critica la persecución a sus padres y vincula las protestas al Movimiento 15-M.
  • Rodrigo Ruiz-Gallardón alerta sobre el peligro de "dejar los cambios en manos de los violentos y radicales".
Alberto Ruiz-Gallardón se encara con los manifestantes concentrados frente a su domilicio.
Alberto Ruiz-Gallardón se encara con los manifestantes concentrados frente a su domilicio.
Paco Díaz Aguilar
Alberto Ruiz-Gallardón se encara con los manifestantes concentrados frente a su domilicio.

Rodrigo Ruiz-Gallardón, de 24 años y uno de los hijos del alcalde de Madrid, ha condenado este martes, en un artículo de opinión en el diario El País, la persecución a sus padres el pasado día 13 y ha advertido que el Movimiento 15-M "se está transformando en una fuente de radicalismo y violencia".

El alcalde Alberto Ruiz-Gallardón y su esposa fueron perseguidos e increpados hace dos días en su calle por personas que le recriminaron la prohibición de celebrar actuaciones musicales en Chueca en las próximas fiestas del Orgullo Gay.

Para Rodrigo Ruiz-Gallardón, el "fundamento de esta protesta no era, como la mayoría de la prensa ha señalado, una falta de acuerdo entre el Ayuntamiento y el colectivo homosexual en relación con la fiesta del Orgullo".

La protesta, en su opinión, "seguía una línea torcida y desvirtuada del Movimiento 15-M", como luego han puesto de manifiesto "las asociaciones de homosexuales y transexuales FELGTB, COGAM y AEGAL al desmarcarse" de los hechos.

A su juicio, el Movimiento 15-M "que empezó como una protesta noble, justificada, de espíritu pacífico y colaborador, se está transformando en una fuente de radicalismo y violencia. Exigen nuevos derechos sin respetar los existentes". "El 15-M gestó un nuevo punto de vista, una mirada joven y diferente, pero no servirá de nada si no se defiende de los peligros que lleva en sí misma. Es evidente que nuestro país necesita cambios, pero si dejamos estos cambios en manos de los violentos y radicales, serán cambios cuyas consecuencias no podremos parar", continúa.

"Ayer tuve miedo de salir de mi casa. ¿Acaso no es eso violencia?", ha continuado el hijo del alcalde, al que le "ha alegrado y aliviado saber que tanto Lissavetzky como Ángel Pérez han condenado estos hechos".

La persecución, de la que hay vídeos y fotografías en redes sociales de internet, se inició cuando el alcalde y su esposa, Mar Utrera, salieron por la noche de su domicilio para pasear a su perro.

Un grupo de personas comenzó a pitar e insultarle al regidor y a gritar "fuera, fuera" y "no nos representas", uno de los lemas más repetidos por el movimiento 15-M en las últimas semanas.

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