El gobernante egipcio se refirió a que en diferentes estados árabes de Oriente Medio hay habitantes chiíes, que son mayoritarios en países como Irak y Bahrein, y cuya "lealtad es a Irán y no a sus respectivos países".

Represión contra los chiíes

También opinó que el ex presidente iraquí Sadam Husein hubiera podido controlar la situación en su país "si hubiera sido justo".

Esta declaración se refiere a la represión contra los chiíes -que constituyen más del 60% de los 26 millones habitantes de Irak-, durante el derrocado régimen que se apoyaba en los suníes.

Las declaraciones de Mubarak aparecen en el tercer aniversario de la caída de Bagdad, un día como hoy hace exactamente tres años.

Miles de muertos

Desde entonces miles de personas perdieron la vida en acciones terroristas en todo Irak.

La violencia sectaria aumentó sobre todo después de que el pasado 22 de febrero fuera atacado un santuario venerado por los chiíes en la ciudad de Samarra, al norte de Bagdad.

Desde entonces, más de 1.700 personas fueron asesinadas en diferentes áreas de Irak, al menos 100 de ellas en los últimos tres días.

Un desgraciado buen ejemplo

Hoy mismo, doce personas han perdido la vida en Irak en diversos ataques.

En las últimas horas, al menos dos personas murieron y otras siete están heridas de diversa consideración por la explosión de una bomba en un microbús en el este de Bagdad, informaron fuentes policiales.

La bomba había sido colocada en el interior del microbús y estalló mientras que el vehículo pasaba por la plaza al Mustansiriya, explicaron las fuentes.

Precisamente en la jornada de hoy se conmemora el tercer aniversario de la caída del régimen de Sadam Husein, el 9 de abril de 2003.

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