El responsable de la investigación del crimen de Betanzos (A Coruña), por el que están imputados Manuel Antonio P.R y Adriana A.C. como presuntos autores de la muerte y descuartizamiento de una pareja en este municipio en 2008, ha manifestado que la acusada —cuya defensa rechaza su participación en los hechos— presentaba manchas de sangre. También ha puesto en duda que se debiese sólo a que ayudó en el traslado de los cadáveres.

A ambos procesados se les considera autores de la muerte y descuartizamiento de José Manuel Gómez y Claudia Alejandra Castelo —el primero era amigo del imputado— y a los que, según el testimonio de Manuel Antonio P., robaron y asesinaron para obtener dinero por encontrarse bajo el síndrome de abstinencia debido a su toxicomanía.

Los dos acusados se enfrentan, respectivamente, a penas de 55 y 47 años de prisión por dos delitos de asesinato y robo con fuerza, además de una petición de 5 meses de cárcel por profanación de cadáveres. La defensa de la procesada pide su absolución y la de Manuel Antonio P.R. que los hechos se consideren homicidio.

Las acusaciones particulares y la fiscalía piden indemnizaciones de 300.000 euros para cada una de las familias. También plantean una pena mayor para el hombre por reincidencia, ya que cumplió conde por haber matado a un taxista. El juicio está previsto que concluya el 15 de junio y un día antes, el 14, que se escuchen las conversaciones que mantuvieron en la prisión de Teixeiro (A Coruña) ambos acusados en relación con el caso.

Declaración de policías

En la segunda sesión del juicio que se celebra en la Audiencia coruñesa, han declarado más de una decena de policías nacionales, así como la mujer que localizó las bolsas en las que se encontraban los cadáveres en la carretera de Covas, en Ferrol, y otro vecino al que le contó lo sucedido.

Uno de estos agentes, el responsable de la investigación, ha manifestado que les llamó la atención "las manchas de sangre de Adriana". "Se veían manchas por salpicadura, no por haber apoyado el cuerpo", ha manifestado en coincidencia con el testimonio del acusado, que ha asegurado que la que era su pareja le asestó varias cuchilladas a José Manuel Gómez, mientras él le golpeaba con un martillo.

Asimismo, ha indicado que la procesada les llevó "perfectamente" a un monte donde habían tirado uno de los cuchillos empleados en el crimen, pero que no localizaron, y ha precisado, asimismo, que "voluntariamente" les dijo, durante el registro del trastero de su vivienda, que faltaba el martillo con el que presuntamente se cometieron los asesinatos.

Estado físico de los acusados

A preguntas de una de las acusaciones, sobre el estado de la pareja al ser detenida, este policía ha señalado que era "de agotamiento" y "deterioro", aunque no pudo concretar si por los días que habían pasado sin dormir o por la toxicomanía que ellos alegan.

Otro agente ha indicado también que el estado de Adriana A.C. "parecía normal" en la grabación de la ferretería donde adquirió una pala tras el crimen, según se puso de manifiesto en la vista oral. Varios policías han constatado, por otra parte, que se limpió el piso tras los asesinatos.

A preguntas del abogado de la acusada, otro policía ratificó que el ADN confirmó que los "cuatro objetos cortantes" localizados y que, presuntamente, se emplearon en los hechos, junto a otro cuchillo y el martillo -que no se encontraron- tenían sólo el perfil genético de las víctimas y del acusado.

Al inicio de la vista oral, la hermana de José Manuel Gómez, ha pedido de nuevo "Justicia" para su hermano y su compañera fallecida "y que caiga todo el peso de la ley". "Para mí la Justicia sería que no salieran de la cárcel", ha admitido.