El Palacio de Festivales cierra este fin de semana su temporada de teatro con la obra más destacada —junto con 'La vida es sueño'— del teatro clásico español: 'El alcalde de Zalamea', también de Calderón de la Barca, y que supone "un canto al sentido común" y a la "capacidad individual" para "enfrentarse" al sistema.

Dirigida por Eduardo Vasco y protagonizada por Joaquín Notario, será representada este viernes y sábado, a partir de las ocho y media de la tarde en la Sala Argenta, por la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

También forman parte del reparto actores como Jaime Soler, que interpreta al capitán don Álvaro de Ataide, y Eva Rufo, en el papel de La Chispa. Ambos, junto con Vasco y Notario, han presentado este viernes el montaje en Santander, en una rueda de prensa en la que han estado acompañados por el director del Palacio, Juan Calzada.

Para el protagonista, 'El alcalde de Zalamea' es un personaje "bellísimo", "soñado por cualquier actor". Así, después de interpretar a Segismundo en 'La vida es sueño', Notario ha visto cumplido su anhelo, aunque no esperaba que fuera "tan pronto".

Tras su actuación en Santander, "aparcará" su papel de Pedro Crespo para centrarse en 'El perro del hortelano', su próximo trabajo.

De 'El alcalde de Zalamea' destaca la defensa que hace de la "dignidad" y la "individualidad" del ser humano, para que nadie se deje "ningunear" por nadie, independientemente de que sea hombre o mujer.

"En el escenario, dejo de existir. Este señor (el alcalde) se pone a hablar solo y cada día me deja con la boca abierta", ha relatado Notario, para recordar que tiene en común con su personaje la procedencia del mundo rural, donde se recibe una educación "sencilla" pero "férrea".

Un hecho que ha contrastado con algunas situaciones de la sociedad actual, que parece estar "prostituida" ya que muchos ciudadanos se dejan llevar por las apariencias y modas y "dejan de ser uno mismo" para "integrarse en el sistema".

Jaime Soler se ha referido a su papel, el capitán don Álvaro de Ataide, un personaje histórico "muy conocido, respeto y admirado", y que, a sus ojos, es el 'alter ego' de Pedro Crespo. El primero "lo razona todo tanto" que "saca de quicio" al segundo, para quien el poder militar "prevalecía" sobre cualquier cosa.

Además, en aquella época (la obra está escrita en torno a 1636) era "impensable" el que alguien se "atreviera" a cuestionar el poder militar.

La culpa y el honor

Isabel, la hija de Pedro Crespo, es la "excusa" para que se "enfrenten" ambos poderes, el civil y el militar, según ha puntualizado la actriz que interpreta a este personaje, Eva Rufo, para quien en 'El alcalde de Zalamea' "reflexiona" sobre la culpa y el honor.

Junto a estas ideas, a lo largo de la obra se exponen otros temas del barroco y de hoy en día, relacionados con la belleza, la naturaleza, el amor, el trabajo y la religión, a través de "unos personajes profundos, sinceros y asombrosamente pegados a la realidad".

Dan vida al resto de personajes David Lorente, Diego Toucedo, David Lázaro, Isabel Rodes, Pedro Almagro, Miguel Cubero, José Juan Rodríguez, David Boceta, María Besant, José Luis Santos, Alberto Gómez, Edu Cárcamo, Eduardo Aguirre de Cárcer y Alba Fresno.