Botella dice que la detención del líder de una banda de sicarios se enmarca en una operación "compleja"

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ana Botella, ha afirmado este jueves que la detención de Carlos Alberto Alarcón, líder de la banda de sicarios colombiana conocida como 'Los Candelos', se enmarca en una operación "compleja" contra las bandas organizadas y este tipo de organizaciones delictivas.

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ana Botella, ha afirmado este jueves que la detención de Carlos Alberto Alarcón, líder de la banda de sicarios colombiana conocida como 'Los Candelos', se enmarca en una operación "compleja" contra las bandas organizadas y este tipo de organizaciones delictivas.

Botella se ha pronunciado en estos términos en declaraciones a los medios de comunicación al ser preguntada por este asunto en un acto de entrega de unos premios. Al respecto, ha destacado que es una operación "compleja" y ha transmitido a la ciudadanía "la lucha sin cuartel para conseguir desarticular todo este tipo de crimen organizado", ha subrayado.

Asimismo, la delegada ha recordado que el pasado año aumentó en la Comunitat la desarticulación de estas bandas armadas en un 13 por ciento, y el número de detenciones también vinculadas a estas organizaciones se incrementó un 16 por ciento.

Respecto a la operación, fuentes de Policía han explicado en un comunicado que Carlos Alberto Alarcón Quintero, alias 'Pipi', figuraba entre los 24 jefes de bandas criminales más buscados por la policía colombiana. Tenía interesada una Orden Internacional de Detención por su participación en el año 2006 en el homicidio de un hombre en Cali que recibió varios disparos a quemarropa.

Su foto figuraba en un cartel con los delincuentes más buscados de Colombia que fue difundido por la policía colombiana y presentado por el expresidente del país Álvaro Uribe durante un Consejo de Seguridad celebrado en la capital del Valle del Cauca.

Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de octubre cuando, en el marco de la colaboración policial bilateral entre España y Colombia, y a través de los órganos de coordinación con la Dirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional de Colombia, se supo que el detenido se encontraba en el país. Alarcón Quintero, de nacionalidad colombiana y 38 años, se había refugiado en España, desde donde continuaba con sus actividades de narcotráfico y sicariato.

Las actuaciones conjuntas de ambas policías concluyeron con su arresto en una plaza próxima a su domicilio en Valencia, donde residía con una identidad falsa.

La operación ha sido realizada por agentes de la Brigada Central de Crimen Organizado de la Comisaría General de Policía Judicial y de la Dirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional de Colombia, con la colaboración de la Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valencia.

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