Felip Puig comparecerá en el Parlament el próximo miércoles para explicar la carga policial

  • La carga contra los 'indignados' en Plaza Catalunya dejó más de 120 heridos.
  • El conseller tendrá ya en sus manos los informes internos sobre el dispositivo.
  • Participaron 350 mossos y entre 80 y 100 guardias urbanos.
  • Hubo 236 salvas de advertencia, 6 disparos de pelotas de goma y 12 proyectiles.
  • 35 camiones de limpieza retiraron 500 metros cúbicos de objetos.
  • Entre ellos había bombonas, palos, maderas, ordenadores y carpas.
Felip Puig, conseller de Interior de la Generalitat.
Felip Puig, conseller de Interior de la Generalitat.
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Felip Puig, conseller de Interior de la Generalitat.

El conseller catalán de Interior, Felip Puig, comparecerá el próximo miércoles en el Parlament para dar explicaciones sobre el dispositivo policial desplegado el pasado viernes en la acampada de los 'indignados' en plaza Catalunya que dejó más de 120 heridos tras varias cargas policiales.

Según han informado fuentes del departamento, Puig tendrá ya en sus manos los informes internos sobre el dispositivo, con todos los detalles sobre qué ocurrió en cada momento y si se produjeron fallos.

El conseller ha repetido en varias ocasiones que el operativo conjunto de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana no tenía como objetivo desalojar a los acampados sino limpiar la plaza por motivos de salubridad y retirar objetos peligrosos para minimizar riesgos de cara a la celebración de la Champions League en Canaletes.

Según él, el operativo fue indispensable y necesario, aunque ha admitido que analizará si hubo errores. Por su parte, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que justificó el operativo por motivos de limpieza y seguridad, ha reprochado este miércoles a los 'indignados' acampados en la plaza Catalunya de Barcelona que ocupen un espacio público de forma ilimitada.

En el operativo, que concluyó con 121 heridos, 37 de ellos mossos, participaron 350 mossos y entre 80 y 100 guardias urbanos, y se realizaron 236 salvas de advertencia, seis disparos de pelotas de goma y 12 proyectiles. En total, 35 camiones de limpieza retiraron 500 metros cúbicos de objetos, entre ellos bombonas de butano, palos, maderas, ordenadores y carpas.

Lluvia de críticas

Al conseller le han llovido las críticas por este operativo desde los grupos políticos, los sindicatos, el Colegio de Periodistas y están investigando lo ocurrido desde el Consejo de Europa, el Síndic de Greuges y la Síndica de Barcelona.

Todos los grupos de la oposición le han pedido que comparezca para dar explicaciones y el vicesecretario general del PSOE y ministro de Fomento, José Blanco, considera que no se actuó bien. Para el PSC, el conseller se extralimitó con los acampados, y desde ERC le reprochan la desproporción de los medios utilizados contra gente pacífica.

ICV-EUiA (formación que en la pasada legislatura dirigía la Conselleria de Interior) le ha responsabilizado de una actuación con violencia innecesaria e injustificada. Más lejos ha ido SI, que ha pedido la puesta en marcha de una comisión de investigación parlamentaria que evalúe en profundidad el operativo porque cree que existen dudas razonables sobre esta actuación.

Representantes de los 'indignados' han reclamado que la autoridad competente investigue la actuación de los Mossos d'Esquadra para que se depuren responsabilidades. Ven injustificado el uso desproporcionado de la fuerza, y tachan de cinismo que se aduzcan motivos de higiene para justificar la operación.

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