Altadis cerrará su centro de Palazuelo (Cáceres) en diciembre por la caída de ventas y la presión fiscal

Facilitará el traslado a otras fábricas en España, sin descartar un programa de prejubilaciones y bajas incentivadas

Altadis cerrará su centro de transformación de tabaco negro ubicado en Palazuelo Empalme (Cáceres), con una plantilla de 23 trabajadores, el próximo mes de diciembre por la caída de las ventas y la presión fiscal, anunció este miércoles la tabaquera propiedad de Imperial Tobacco.

La compañía ha adoptado esta decisión en el contexto de un mercado de tabaco que viene soportando una "creciente y fuerte" presión fiscal y regulatoria en España.

A ello se suma, según la tabaquera, el "acusado" descenso del segmento de tabaco negro que viene registrando el mercado año tras año. Actualmente, sólo el 9% de los cigarrillos que se venden en España corresponden a tabaco negro, mientras que cuando se inauguró la línea de producción en Palazuelo en 1991, la demanda de tabaco negro representaba el 41% del mercado.

A todas estas circunstancias se añade también el hecho de que la evolución en los sistemas de producción y la concentración del primer paso del proceso en los países de origen hacen que la actividad de batido de tabaco sea "cada vez más innecesaria" para Altadis realizarla internamente, explicó la compañía.

Por ello, Altadis transferirá parte de la actividad de tabaco batido de Palazuelo que no pueda ser atendida por los diferentes proveedores a la Compañía Española de Tabaco en Rama (Cetarsa), sociedad estatal ubicada en Extremadura y en la que cuenta con una participación del 21% del capital.

Según explicó la compañía, los trabajadores de Altadis y sus representantes sindicales han sido ya debidamente informados de esta decisión, en la que el principal objetivo será el mantenimiento del empleo, con el traslado de los trabajadores afectados a otras fábricas en España, sin descartar tampoco un programa de prejubilaciones y/o bajas incentivadas.

En concreto, Altadis planteará la negociación con la representación sindical en el marco de una extensión del expediente de regulación de empleo aprobado por el Ministerio de Trabajo en marzo de 2009, al tratarse de causas muy similares a las que lo motivaron y estar contemplada esta posibilidad en el acuerdo, a pesar de que no se reúnen todas las condiciones de un despido colectivo.

"Altadis siempre ha utilizado la vía del diálogo con los representantes de los trabajadores, lo que ha permitido aplicar distintas iniciativas de ayudas sociales que han contribuido a reducir el impacto de los distintos procesos de reestructuración acometidos en el pasado", señaló.

Las ventas de cigarrillos negros en España han sufrido un descenso medio de casi el 17% en el periodo 2007-2011, caída que se ha acentuado durante los cuatro primeros meses de este ejercicio al situarse en el 26,5% y cuya tendencia descendente se mantendrá los próximos años. Sólo el 2% de los consumidores españoles fuma cigarrillos negros, según Altadis.

Ya alerto al gobierno.

Altadis ya había alertado en marzo al Gobierno de las consecuencias negativas que tendría la subida fiscal "tan drástica" que aprobó el pasado mes de diciembre y la entrada en vigor de la ley antitabaco.

Asimismo, las mismas fuentes explicaron que la tabaquera estaba revisando "constantemente" sus estructuras para que estén adaptadas al mercado, aunque precisaron en ese momento que no existía una decisión adoptada en este momento sobre un eventual cierre de fábricas.

Tras el cierre de la factoría de Palazuelo (Cáceres), Altadis contará con la fábrica de cigarrillos en Logroño, una planta de cigarros en Cantabria y otra factoría en Cádiz.

La compañía remitió además el pasado mes de junio cartas a los presidentes autonómicos de Extremadura, Andalucía, La Rioja y Cantabria en las que ya alertaba de que la ley antitabaco podía poner en riesgo el empleo de las fábricas y de las consecuencias negativas que podría tener la norma sobre los intereses económicos de cada una de las regiones.

En las cartas, Altadis manifestaba que su larga experiencia en el sector ha demostrado que "la insistente y asfixiante presión regulatoria contra el tabaco ha sido uno de los factores decisivos que ha obligado a llevar a cabo distintos procesos de reestructuración durante los últimos años".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento