El presidente del Senado, Javier Rojo, ha defendido este miércoles la dimisión de la responsable de Sanidad de Hamburgo, Cornelia Prüfer-Storcks, por haber culpado a los pepinos españoles de portar la bacteria 'E.Coli' y ha reconocido también que el papel de la Unión Europea con este caso "queda en entredicho".

En declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, Rojo ha calificado como "una falta de responsabilidad" política las acusaciones sin pruebas vertidas por la responsable alemana y ha advertido de que, si el mismo caso hubiera sucedido en España, se estaría culpando directamente al político acusándole de haber perjudicado a un país "y con unas consecuencias por determinar".

"No entiendo cómo todavía no ha presentado su dimisión esta señora", ha reconocido el presidente de la Cámara Alta al insistir en que, si finalmente todos los análisis demuestran que los productos españoles no están relacionados con la bacteria, "ese acto político de esa responsable tendría que tener unas consecuencias", que a su juicio serían "poner el cargo a disposición".

Según ha enfatizado, sus acusaciones han causado "unos perjudicios muy importantes a España", que ha subrayado que es el país que "mayores controles tiene". Así, aunque ha reconocido que Alemania es un socio "fiable", ha incidido en que "eso no quiere decir que no se equivoque y se le exijan responsabilidades".

Actuar con serenidad pero con responsabilidad

A juicio de Rojo, ante esta situación "se pueden hacer muchísimas cosas" y considera que "se están haciendo" y "el papel del Gobierno es el correcto", ya que "hay que exigir compensaciones".

Pero además, ha asegurado que "queda en entredicho" el papel de la Unión Europea, porque los ciudadanos "quieren entender cosas" y se deben "exigir responsabilidades". "No puede ser que esto lo paguen siempre los productores, España, nuestra marca, lo que representamos —ha lamentado—. Ante esto, con serenidad pero con responsabilidad".