La mayor parte pertenecen a las facultades de Filosofía y Letras, con 279, y Económicas y Empresariales, con 143. El plazo para solicitarlas termina el 17 de abril y los principales destinos son Francia, Italia, Alemania, Portugal y Austria. El servicio de relaciones internacionales, en la Casa del Estudiante, se encarga de gestionarlas.

Las experiencias de los estudiantes

Willeke Brouwers. «Aquí la gente es fantástica»

Es holandesa y, aunque sólo  lleva aquí desde el 10 de febrero, habla español perfectamente, igual que el inglés, el francés y el alemán.

¿Por qué elegiste Valladolid?

Aquí puedo trabajar y estudiar al mismo tiempo. Además es una ciudad pequeña y hay más posibilidades, sobre todo de alojamiento, porque hay menos extranjeros.

¿Qué te aporta esta experiencia?

Es algo muy gratificante. Estoy muy contenta porque las clases son muy interesantes y la gente es fantástica.

¿Lo recomendarías?

Sí. Te aporta mucho también en el ámbito personal. Para mí, que estudio Traducción, me sirve mucho porque la pronunciación es algo que no practicamos en Holanda.

¿Te quedarías a vivir aquí?

No lo sé, pero me gusta mucho la forma de vivir en España. Aquí se trabaja para vivir, no como en Holanda, que tu trabajo es lo que te define.

¿Conocías España?

Sí, el verano pasado trabajé en la Oficina del Peregrino de Santiago de Compostela.

Jesús Sampedro. «Es una gran experiencia para todo»

Su beca Erasmus, hace cinco años, le marcó y le abrió puertas laborales y personales. Su novia es polaca y trabaja en el Instituto Español de Comercio Exterior (Icex).

¿Dónde y por qué te fuiste?

Estuve en Suecia, me parecía un país muy diferente y  que tiene un sistema económico y una educación pública muy avanzada. Para mi carrera, Empresariales, me aportaba mucho.

¿Cómo calificarías la experiencia?

Aconsejo a todo el mundo vivir y estudiar un año fuera. Creo que no debería haber ningún estudiante que no se fuera de Erasmus. Es una experiencia enriquecedora en todos los sentidos.

¿El dinero es un problema?

Depende del país al que te marches. Hay algunos en los que encontrar un trabajo temporal es complicado por el idioma. Yo tuve suerte, porque di algunas clases de español en la universidad de allí y eso te ayuda.

¿Has vuelto al extranjero después?

Sí, trabajé en Dinamarca un año más, en el Icex.