Tres nuevas juezas se han incorporado al Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB) después de que este jueves hayan jurado o prometido el cargo en la Sala de Gobierno, presidida por el presidente de este órgano, Antoni Terrasa, y con la asistencia del fiscal superior, Bartomeu Barceló, y la directora general de Justicia, Marta Díaz.

Las nuevas magistradas ocuparán sus plazas en los juzgados de Manacor. Concretamente, Olga María Marzo (natural de Santander) entrará a formar parte del Juzgado de Primera Instancia número 2 de Manacor; Clara Rodríguez Nieto (natural de Zamora) será titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Manacor; y María Pascual Hernando (natural de Valencia) será jueza de adscripción territorial de Baleares, que desempeñará sus funciones en el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Manacor.

Clara Rodríguez ha comentado que decidió solicitar plaza en el TSJIB después de haber realizado unas prácticas en verano en los juzgados de violencia, tras las que consideró que trasladarse a la isla sería una buena experiencia para su primer destino profesional.

Olga María Marzo también conocía con anterioridad Mallorca, donde había acudido de vacaciones, y piensa que en el plano profesional es una destino "interesante". La nueva jueza ha asegurado que hay "muchísimo trabajo" aquí, si bien ha puntualizado que hay "muy buen ambiente" y cree que lo van a poder "llevar bien".

Por su parte, María Pascual ocupará una de las dos plazas de juez de adscripción territorial que hay en el TSJIB. Se trata de jueces titulares que están asignados a una Tribunal Superior, órgano que tiene la potestad de designar las plazas en las que deben desempeñar sus funciones, con la finalidad de cubrir vacantes, ausencias temporales del titular o llevar a cabo funciones de refuerzo en el ámbito provincial para el que han sido asignados.

Así, Pascual ha señalado que son jueces que cubren vacantes de larga duración con el objetivo de "dar una respuesta rápida para que un juzgado no quede sin un titular y, sobre todo, que sean gente de carrera", ha explicado. De este modo, esta jueza puede ser destinada a cualquiera de los juzgados adscritos al TSJIB en función de las necesidades.

Las tres magistradas proceden de la última promoción de la Escuela Judicial, la número 61, de las que han salido 134 jueces, ninguno de ellos de Baleares.

Falta de medios y carga de trabajo

Rodríguez ha hecho mención de la situación en la que se encuentran los juzgados de la amplia mayoría del territorio español, donde a pesar de que se van creando juzgados nuevos "no se les dota suficientemente", con lo cual "en poco tiempo se colapsan y vuelven a necesitarse juzgados nuevos".

A su parecer, lo que necesitan los juzgados es que los jueces tengan "continuidad" en las salas, por lo que ha destacado que su incorporación al menos contribuirá a dar "continuidad durante todo su primer destino", que es de en torno a un año prorrogable a tres.

Martínez también ha incidido en que suele haber carencia de medios materiales y personales, si bien ha apostillado que "con fuerza de voluntad" pueden hacer frente a ello.

En la misma línea se ha expresado Pascual, quien ha señalado que aunque hay "mucha carga de trabajo" y "falta de medios", ha subrayado que este hecho no es "un problema exclusivo de Baleares", sino que "es una situación generalizada". No obstante, ha señalado que al llegar a la isla se ha encontrado con "la agradable sorpresa" de que aunque aquí "no hay medios", "sí que hay un personal que tiene muchísimas ganas de hacer las cosas".