La Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) y la Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza (CSZ) han renovado el convenio de colaboración que mantienen desde hace 25 años para ayudar a que personas con problemas de drogodependencia abandonen sus adicciones y logren su reinserción en la sociedad, dentro del denominado 'Proyecto Hombre'.

La directora de la Obra Social de CAI, María González, y el presidente del Comité Ejecutivo de CSZ, José Ignacio Bonafonte, han firmado el nuevo acuerdo por el que CAI destina 20.000 euros a la Fundación para que desarrolle su labor en la Comunidad Terapéutica Entabán, situada en el barrio de Miralbueno de Zaragoza.

Este centro forma parte de 'Proyecto Hombre' y atiende a drogodependientes que se encuentran en proceso de tratamiento y rehabilitación, en régimen residencial.

Desde su creación, este programa ha atendido a 1.538 personas, con una estancia media de 8 a 10 meses por cada persona. Así, 134 siguieron en 2010 su proceso de rehabilitación en la comunidad terapéutica, con una ocupación media de 45 usuarios.

En los últimos seis años, la Obra Social de CAI ha destinado 270.000 euros para las actividades asistenciales de la Fundación, así como para mantenimiento y adecuación de las instalaciones que gestiona en la capital aragonesa.

"Estamos convencidos de la importancia de apoyar estas iniciativas, sobre todo ahora, ya que en los últimos años se ha disparado el número de personas que atiende 'Proyecto Hombre'", ha indicado la directora de la obra social de la CAI.

Las dos instituciones iniciaron su colaboración en el año 1986, lo que permitió la puesta en marcha de la fase de acogida del programa educativo-terapéutico 'Proyecto Hombre'. CAI cedió a CSZ unos locales en la calle Sixto Celorrio y, posteriormente, en la calle Manuela Sancho y Heroísmo, donde actualmente desarrolla el Programa de Tratamientos de Adicciones.