Una persona con movilidad reducida que no podía acceder al colegio electoral de La Adrada (Ávila) pudo votar después de que los integrantes de la mesa sacaran la urna a la puerta del centro, según destacó este domingo el subdelegado del Gobierno, César Martín Montero.

Al realizar un balance del inicio de la jornada electoral, el subdelegado ha explicado la anécdota, en un 22-M que ha comenzado con "normalidad" en la provincia de Ávila.

En algunas mesas electorales no acudieron los titulares como presidentes y vocales designados por sorteo, y su puesto fue ocupado por los suplentes, señaló el representante del Gobierno en Ávila.