Extremadura ha sido una de las dos "únicas" comunidades autónomas, junto a Madrid, donde el precio de la vivienda subió el año pasado, con un incremento del 1,7 por ciento en el precio medio, según un análisis del Instituto de Práctica Empresarial.

El crecimiento "más importante" la ha experimentado la vivienda nueva, con en un 2,2 por ciento, mientras que la segunda mano ha subido un 0,8 por ciento, según datos del Instituto Nacional de Estadística, de acuerdo con una nota de prensa remitida por Instituto de Práctica Empresarial (IPE).

El director de la cátedra Inmobiliaria del IPE, José Antonio Pérez, estos datos apuntan a un "cambio de tendencia" dentro del sector en la región, dado que "todo parece indicar" que los precios "han tocado fondo" y que "a partir de ahora seguirán la tendencia habitual" de ganar valor con el paso del tiempo.

Eso ocurrirá, según Pérez, "a medida que se consolida el ritmo al alza de compraventas y se continúa drenando stock, ya que el número de compraventas actuales es mayor al de vivienda nueva terminada".

Además del precio, existen otros datos que revelan que se está produciendo "un giro" en la evolución del sector y que en próximos meses se producirá una "lenta recuperación" del mismo. En Extremadura, el stock de viviendas nuevas terminadas sin vender es del 0,5 por ciento sobre el total del existentes, "según datos del Ministerio de Fomento".

"Si a esto le añadimos que, en estimaciones del IPE, se está dando la tendencia de vender más de lo que se termina de construir, a finales de 2011 puede darse la situación de que se agote el stock en zonas donde la demanda desea residir y sea de nuevo necesario empezar a construir, lo que implicará una reactivación del sector y la consecuente subida de precios ante la escasez de oferta", sostiene José Antonio Pérez.