La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de León ha aprobado en su última sesión celebrada este jueves los proyectos básicos para las dos últimas recuperaciones de calles en el casco histórico de la ciudad, que supondrán una inversión de 1,8 millones de euros y con las que se completará la reurbanización de la zona.

Concretamente, se renovará el pavimento y los servicios de la plaza Serradores y la calle Caño Badillo, así como los de Pablo Flórez y San Pelayo, en el Barrio de Santa Marina.

Los dos proyectos serán enviados a la Comisión Territorial de Patrimonio, ya que afectan a calles y plazas ubicadas en el casco antiguo, con el fin de obtener un informe que preceptivo y vinculante en un plazo de tres meses. En las memorias se acompaña un proyecto para el seguimiento arqueológico de las obras, según informó el Ayuntamiento de León en una nota recogida por Europa Press.

Estas obras de reurbanización mejorarán el mal estado de la pavimentación y las redes de servicios. Estéticamente se seguirá el modelo de las intervenciones realizadas en el entorno del Palacio del Conde Luna y el resto de la ciudad antigua, en las que se cubre de adoquín negro la calzada y de granito gris la peatonal y se renovará el mobiliario urbano y las farolas.

Durante la actual legislatura, se han invertido 2,8 millones de euros en la reurbanización del entorno sur de la Calle Ancha y de los sectores norte y sureste de la ciudad antigua mediante la financiación procedente los planes E del Gobierno central.

En las actuaciones aprobadas en la última Junta de Gobierno se ha tenido en cuenta el diseño del espacio público como lugar de comunicación y encuentro de la ciudadanía, como es el caso de las plazas de Serradores y San Pelayo, donde se crearán lugares que le devuelvan la función social.