Según ha dicho a Europa Press el presidente del comité de empresa de Locsa, Francisco Pozuelo, así se lo ha asegurado este martes en Córdoba a él y a otros miembros del comité de empresa y responsables de MCA-UGT de Andalucía y de la Federación de Industria CCOO-Andalucía, con los que ha analizado, en la Delegación de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta en Córdoba, las opciones de futuro para esta fábrica, la única en España dedicada a fabricar laminados y derivados de cobre y zinc, cuyo próximo cierre ha anunciado su actual propietaria, la multinacional italoalemana KME, alegando pérdidas.

Sin embargo, los trabajadores afirman que la empresa es viable y que, con la gestión adecuada, podría incrementar su cartera internacional de pedidos y, por ende, su producción, precisando incluso un aumento de plantilla, opinión que la Junta comparte, según ha destacado Pozuelo, "y la misma postura tiene el Ministerio de Industria y también la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino", la cordobesa Rosa Aguilar, con quienes se reunieron los trabajadores de Locsa este lunes en Madrid.

Precisamente, el viceconsejero ha dicho este martes en Córdoba a los representantes sindicales y del comité de empresa de Locsa que "va a trabajar en la misma línea que el Ministerio de Industria" y la titular del MARM, "buscando opciones para asegurar la continuidad de Locsa, expandir su actividad y crear más empleo de calidad". Por eso, Nieto ha anunciado que, de acuerdo con Industría, la estrategia de la Junta es convencer a KME de que mantenga su factoría cordobesa, o bien la deje en manos de otro inversor, posibilidad que hasta ahora no ha contemplado la multinacional, que ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) que afecta a los 120 trabajadores (30 prejubilados) de Locsa.

De hecho, en el marco del trámite de dicho ERE, Pozuelo ha detallado que la Inspección de Trabajo, tras reunirse con el comité de empresa de Locsa, mantendrá un encuentro este miércoles con responsables de KME en España, los cuales, posteriormente, se reunirán con el comité de empresa de Locsa, con la esperanza, por parte de los representantes de los trabajadores, de que la multinacional, al comprobar el respaldo institucional que están recibiendo para el mantenimiento de la factoría, cambien de actitud, porque "el comité de empresa no negociará la pérdida de puestos de trabajo, solo hablará de opciones para mantener e incrementar la plantilla".