El pueblo de Vélez-Rubio (Almería) ha arropado este viernes a la familia del adolescente de 13 años fallecido durante el terremoto registrado el pasado miércoles en Lorca (Murcia) en la misa funeral en su memoria que se ha celebrado en la Iglesia de la Encarnación del municipio del que es oriunda su madre.

El féretro con los restos mortales del menor, quien moría por la caída de varios cascotes procedentes del inmueble en cuyos bajos se ubica el bar familiar, ha llegado a alrededor de las 12,00 horas al templo en medio del tañir de campanas, donde se ha celebrado el responso en la más "estricta intimidad", según han informado a Europa Press fuentes municipales.

La comitiva fúnebre, en la que ha estado presente la alcaldesa, Isabel Navarro, para trasladar la consternación por la tragedia en un municipio que cuenta con muchos de sus vecinos residiendo en la vecina Lorca, ha abandonado la Iglesia de la Encarnación camino del cementerio municipal en el que el menor ha recibido sepultura.

Las mismas fuentes han precisado que la familia del adolescente, "muy extensa", es muy conocida y apreciada en esta localidad del norte de la provincia almeriense ya que varios de sus integrantes están al frente de establecimientos hosteleros o pequeños comercios.