El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar, ha considerado este miércoles "reprobable en todos los puntos" que el expreso de ETA Ander Errandonea exhibiera, al salir de la cárcel, una pancarta a favor de Bildu, señalando que no puede "admitir que, a la salida de la cárcel, se pueda hacer un acto de este tipo".

En declaraciones a los periodistas en Sevilla tras reunirse con los operadores judiciales de la ciudad, Dívar ha señalado, no obstante, que serán los tribunales "concretos" los que deban decidir si se ha producido o no una actuación delictiva, tras lo que ha subrayado su "reproche moral y absoluto" y la sensación "de malestar interior" que le ha producido la imagen del expreso de ETA con la pancarta de Bildu.

De igual modo, y cuestionado por la sentencia emitida por el Tribunal Constitucional (TC) para legalizar a Bildu, en contra de lo dictaminado anteriormente por la Sala 61 del Tribunal Supremo (TS), el presidente del Supremo ha trasladado su "respeto" tanto al presidente, Pascual Sala, como al resto de magistrados del TC, señalando que "lo que haya hecho es cosa suya", y ha dicho que las resoluciones judiciales "no son nunca reproches, son simplemente la voz del Estado que se pronuncia para resolver un conflicto".

Al hilo de ello, Dívar ha incidido en que "nadie" le ha dado autorización "para convertirse en juez de otros jueces y calificar al Constitucional". "Existen situaciones muy propias para la crítica, diferencias de apreciación y de criterios entre resoluciones, pero son ustedes —en referencia a los medios de comunicación— los que conforman la opinión pública y los que pueden juzgar a los jueces y sus comportamientos", ha apostillado.

"rigor jurídico y honestidad" de la sentencia del ts

No obstante, ha eludido opinar sobre las críticas que ha recibido el TC por su sentencia, aunque sí se ha referido a la emitida por el Supremo para poner de manifiesto que "ha sido hecha con rigor jurídico, alta profesionalidad y honestidad", aunque ha querido dejar claro que los jueces "no son infalibles, y de hecho tenemos un sistema de recursos muy amplio para poder corregir nuestros propios errores". "En pocas profesiones existen para la corrección de algún error tantas posibilidades de recursos", ha agregado.

"Todos las críticas, por muy adversas que sean, son respetables, incluso las más duras, pero a veces dejan de ser críticas para convertirse en descalificaciones personales", según ha proseguido Dívar, quien ha instado a diferenciar "entre la crítica mas rigurosa que se puede hacer a los tribunales y lo que son las descalificaciones tanto a las personas como a las instituciones, que todos debemos respetar", tras todo lo cual ha puesto de manifiesto que "en España estamos teniendo bastante crisis, y vamos a crear otra crisis como es la de las instituciones".

Por último, Dívar ha aseverado que "no está a sueldo de nadie, pues sólo faltaba que me pague el PP", y ha subrayado que, en la sentencia sobre Bildu, votó "lo que creía en conciencia, en derecho y en Justicia". "Eso es lo que he votado a lo largo de mi vida judicial, que ha pasado de 42 años, y así seguirá siendo en lo poco que me queda de carrera e incluso de vida", ha sentenciado.