La Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria ha invertido 192.143 euros en la renovación de la red de saneamiento del barrio de Gismana en Ruente.

En concreto, se ha instalado una red de saneamiento para separar las aguas fecales y pluviales, según informa el departamento que dirige Francisco Martín en un comunicado.

Además, las obras, ejecutadas por la Dirección General de Obras Hidráulicas y Ciclo Integral del Agua por medio de la empresa Construcciones y Excavaciones Aníbal, han construido diversos pozos de registro que permiten el control y mantenimiento de los colectores de saneamiento.

El consejero de Medio Ambiente ha señalado que esta obra "hará más eficiente" el saneamiento de esta localidad, ya que la separación de redes contribuye a "mejorar el funcionamiento de las depuradoras".

Martín ha recordado el "gran avance" que en esta materia ha dado Cantabria en los últimos ocho años con la consiguiente mejora de la calidad de las aguas fluviales de la región.

La base de la obra se centra en la instalación de un colector destinado a la recogida de las aguas fecales, de forma que la antigua red se utiliza ahora para la recogida de las aguas pluviales.

Posee un trazado paralelo al colector de la red anterior, aunque dispone también de un ramal adicional hacia el interior del barrio.

Hasta el momento, el barrio Gismana, en Ruente, poseía una red de saneamiento de tipo unitario, cuyo mantenimiento era dificultoso, ya que no disponía de registros distribuidos convenientemente.