Un vecino de Caravaca de la Cruz ha pedido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Murcia que libere unas fincas de la hipoteca que pesa sobre ellas, constituida en el año 1891, por la que está obligado a pagar un gravamen "en monedas de plata o de oro".

Al respecto, el juzgado ha emitido un edicto en el que explica que la hipoteca fue constituida ese año a favor de Antonio J.D., quien se comprometía a suministrar mercancia del establecimiento que poseía a Asunción C.M. "hasta la cantidad equivalente a 18 euros con tres céntimos".

Para asegurarse el cobro de estos suministros, la destinataria de los mismos constituyó la hipoteca a favor del vendedor, que es la que ahora se trata de suprimir a través de este expediente judicial de liberación de cargas. Las fincas hipotecadas están constituidas por varios trozos de tierra ubicados en distintos parajes de Caravaca de la Cruz.

El Juzgado ha citado a Antonio J.D. "y a los herederos, en su caso", como titular del gravamen cuya liberación se solicita para que pueda personarse en las actuaciones y presentar las alegaciones que considere oportunas. La hipoteca aún continúa en vigor porque hasta ahora nadie se había ocupado de su cancelación ni tampoco del gravamen que pesaba sobre la misma.