La confianza de los consumidores subió en abril y recuperó el nivel perdido en el mes de marzo, gracias a una mejor perspectiva de la economía española, aunque se mantiene la incertidumbre global debido a la inestabilidad política en algunos países árabes y el rescate financiero de Portugal.

El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), que elabora el Instituto de Crédito Oficial (ICO), subió en abril 4,9 puntos y se situó en 73,2 puntos, aunque se mantiene por debajo de los 78,2 puntos alcanzados en abril de 2010.

El ICO explica que los mencionados sucesos internacionales, a los que suma el terremoto de Japón, pueden estar detrás de la fuerte volatilidad de este índice en los dos últimos meses y explicar los vaivenes en el ánimo de los consumidores.

Según la entidad, los movimientos del indicador en torno al nivel de los 70 puntos parecen responder a una dinámica de "sobrerreacción-corrección", de forma que los consumidores subsanan la reacción excesiva que mostraron ante determinados acontecimientos el mes anterior.

Después de los máximos alcanzados el mes anterior, los consumidores disminuyeron en abril sus expectativas de inflación y de subida de los tipos de interés, que también son menores a las de hace un año.

Esta moderación podría indicar que los entrevistados no esperan que la reciente subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo sea el comienzo de una senda de subidas en los próximos meses.

Asimismo, se incrementaron las perspectivas de ahorro y la de adquisición de bienes de consumo duradero, lo que -en opinión del ICO- es coherente con la mejora general de la confianza y sugiere una mejora moderada del gasto de los consumidores.

Dentro del indicador general de confianza, el indicador parcial sobre la situación actual subió en abril 5,1 puntos respecto a marzo y se situó en 49,2 puntos, como consecuencia de la mejor percepción de la economía del país y, en menor medida, del empleo y la economía familiar.

El indicador parcial de expectativas subió 4,7 puntos y se situó en 97,2 puntos, debido sobre todo a unas mejores las perspectivas futuras para la economía española.

El ICO elabora el Indicador de Confianza a partir de una encuesta a 1.000 ciudadanos, a los que se les pide valorar como "mejor" o "peor" la situación de su economía familiar, la economía española y el empleo respecto a la que existía seis meses antes, así como sus expectativas para los próximos seis meses sobre estas tres mismas cuestiones.

Los valores oscilan entre 0 y 200 puntos, de forma que si el indicador está por encima de 100, la percepción es favorable y optimista, y por debajo de 100 es negativa y pesimista.