Bioparc Fuengirola, ubicado en esta localidad malagueña, ha sido, hasta ahora, el único zoológico español que ha conseguido en tres ocasiones la reproducción del lemur negro, teniendo lugar el último de los nacimientos de animales de esta especie, el pasado 3 de marzo.

En época reproductora, los responsables del zoo, con intención de proporcionar más privacidad a la pareja de lémures, sitúan a estos animales en dormitorios interiores para minimizar así cualquier tipo de molestia, actuación que parece haber sido "la clave del éxito", según han informado desde el centro en un comunicado.

Dos meses después, tanto la madre como el bebé se encuentran en perfectas condiciones y desde esta semana disfrutan de las instalaciones exteriores del zoo, una recreación de un gran árbol Baobab, que se erige sobre la isla de Madagascar del parque.

La pequeña, que aún no tiene nombre, convive con su padre Benji, de 12 años y que vino en 2005 procedente de Italia. La madre se llama Lordes, tiene 10 años y fue trasladada en 2001 desde el zoo de Cologne (Alemania). Este grupo reproductor comparte la instalación con otras tres especies de lémures: lemur de cola anillada, vari blanquinegro y vari rojo.

Especie "vulnerable"

Esta especie, catalogada por la Unión para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), se encuentra en Bioparc Fuengirola bajo uno de los 40 programas europeos de reproducción en cautividad (EEP) que lleva a cabo el parque. Se estima que existe una población de entre 10.000 y 100.000 individuos que sólo viven en el noroeste de Madagascar, en la región de Sambirano.

En esta región se localizan dos parques protegidos donde viven sin ninguna amenaza exterior pero, fuera de ésta, se encuentran en peligro por la destrucción de su hábitat y su caza ilegal para alimento.

Así han recordado que en Europa existe una población cautiva de esta especie de 100 ejemplares, estando presentes solo en tres zoológicos españoles.