UGT y CCOO han vaticinado que la Ley de Medidas Extraordinarias, más conocida como el 'tijeretazo', se extenderá hasta 2013, por lo que han advertido que "será difícil recuperar las condiciones de trabajo existentes a diciembre de 2010".

En una rueda de prensa conjunta, los secretarios generales de sendos sindicatos en Murcia, Antonio Jiménez y Daniel Bueno, respectivamente, han hecho su primera valoración tras conocer la decisión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de autorizar la emisión de deuda a la Comunidad.

Así, Jiménez ha manifestado su alegría porque al final "se desbloquee esa situación de suspensión de pagos extensa en el tiempo que tenía el Gobierno regional", aunque ha dejado claro que éste "no es el camino que dará solución a la maltrecha economía regional".

Por ello, ha dejado claro que "no se puede aceptar que se consiga endeudamiento poniendo como aval una pérdida de retribuciones y condiciones de trabajo de empleados públicos".

"Este endeudamiento no es la solución para Murcia", ha subrayado, para añadir después que "necesitan reformas de mayor calado que apuesten por soluciones sociales y no antisociales, el aumento de la competitividad y de la capacidad productiva de las empresas murcianas, incrementar las inversiones productivas e impidiéndose el desprecio a la dignidad de las condiciones de trabajo".

Por su parte, desde CCOO Daniel Bueno ha enfatizado que, según se contempla en el Plan de reequilibrio, "se van a reducir en 144 millones el capítulo de gastos de personal y se nos sigue diciendo que el 1 de enero deja de tener efecto el tijeretazo".

"El presupuesto del capítulo I para el año 2012 y 2013 no tiene prácticamente ningún incremento respecto a 2011 recortado, por lo que las condiciones aprobadas en dicho apartado se van a seguir manteniendo durante tres años, tal y como ya se advirtió", ha denunciado públicamente Bueno.

En esta línea, Jiménez ha puesto de manifiesto que la Ley de Medidas sigue la máxima de "trabajar más y ganar menos, al tiempo que reduce salarios, elimina oferta de empleo público, termina con la formación de los trabajadores, y con los créditos sindicales".

Unos recortes sociales, a su juicio, "que no sólo están teniendo nefastas consecuencias en el colectivo del empleado público regional sino que su efecto contagio se está expandiendo ya al resto de empresas públicas y privadas, representadas por una patronal que emula los recortes que ha puesto en marcha el Gobierno murciano".

Por ello, Bueno ha llamado a "actuar con eficacia y transparencia, con rigor", porque, ha lamentado, " se está destruyendo empleo público y se plantea hacerlo con más intensidad en el segundo semestre del año".

Para concluir, desde UGT su secretario general en Murcia ha advertido que "el adelgazamiento del volumen de la Administración se cifra entre los 2.500 y los 3.000 puestos de trabajo, ya que a las previsiones iniciales se suman en el plan de reequilibrio unos 230 empleos que van a salir de un plan de reordenación de efectivos arbitrario".