La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria ha confirmado una condena de nueve meses y un día de cárcel para un hombre acusado de empujar y golpear a su compañera sentimental cuando ella trataba de impedir que él se marchara de la vivienda que compartían.

Según se explica en una sentencia fechada el pasado 5 de abril, los hechos sucedieron el 6 de agosto del año 2008 en la vivienda en la que la pareja residía junto a la madre de la mujer.

Ese día, el acusado, B.G.D., llegó al domicilio y, "por motivos de celos", lanzó un teléfono móvil a la piscina, tras lo cual se dirigió a su dormitorio a recoger sus efectos personales con la intención de marcharse.

Su compañera y la madre le siguieron para evitar que se marchara, y comenzó entonces un forcejeo entre la pareja durante el cual el acusado agarró a su compañera por el cuello y el brazo y la lanzó contra la pared.

El hombre logró salir de la vivienda mientras le seguía su compañera, que intentó sacar varios objetos del coche del acusado, ante lo cual, él la sacó de los brazos y la tiró al suelo.

El Juzgado de lo Penal número 5 de Santander le condenó en noviembre de 2010 por un delito de violencia de género a nueve meses y un día de cárcel. Además, le prohibió portar armas por el plazo de un año y un día, y acercarse a menos de 200 metros de su ex pareja o comunicarse con ella durante dos años.

El acusado recurrió ante la Audiencia pidiendo que se le aplicara la eximente completa de legítima defensa porque, según sostenía, fueron su compañera y la madre de ésta las que le agredieron a él, que se limitó a zafarse de ellas.

Sin embargo, la Audiencia recalca que no se ha probado que existiera agresión previa y, de hecho, recuerda que el acusado ni siquiera compareció en el juicio para dar su versión. Por tanto, rechaza el recurso y confirma la sentencia del Juzgado de lo Penal.