La Policía Nacional de Avilés ha desarticulado una red que introducía y distribuía droga en Las Vegas (Corvera) y Avilés. Los detenidos son un matrimonio que regenta un bar en Corvera, V.P.V. de 48 años y M.J.F.A.de 51 años, y él socio de éstos, P.M.F.A. de 36 años, natural de Avilés.

Los dos detenidos varones cuentan con antecedentes por trafico de drogas, ingresando el principal implicado en el centro penitenciario de Villabona por orden del titular del juzgado de instrucción número dos de Avilés, que llevó la supervisión de las investigaciones.

Los hechos se produjeron cuando funcionarios de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Avilés, en compañía de Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Asturias y de las Comisarías de Gijón y de Langreo, en la mañana del día 7, procedieron a la detención, como presuntos integrantes de la red, a una pareja domiciliada en Corvera y pocos días después al tercer implicado en el Tráfico de Drogas, un vecino de Salinas (Castrillón).

La investigaciones llevadas a cabo por los Agentes avilesinos se iniciaron meses atrás, a raíz de múltiples informaciones que apuntaban a un bar de la localidad de Las Vegas como uno de los mayores puntos de distribución de droga de la región, concretamente de cocaína, siendo su propietario el principal responsable de la ilícita venta.

Según informa la Policía, estas investigaciones "ponían de manifiesto que el principal responsable se trasladaba con cierta periodicidad a otras provincias para proveerse de la sustancia que luego introducía en el Principado de Asturias con la ayuda de su socio, quien a su vez realizaba tareas de vigilancia en las carreteras para no ser detectados, realizando siempre los viajes en dos vehículos, para evitar los controles de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad".

Se ha comprobado en el momento de la detención que la furgoneta que utilizaba para los viajes, había sido modificada en su carrocería, habilitando cuatro compartimentos para ocultar diversas cantidades de droga. Una vez en esta ciudad, utilizaban un garaje próximo al bar para ocultar y preparar la droga para su distribución final en el establecimiento.

Este entramado estaba siendo llevado a cabo bajo la tapadera de otros negocios legales y la actividad del bar en el que distribuían las dosis de cocaína.

En el momento de las detenciones, dentro del garaje los investigadores hallan una especie de laboratorio de estupefacientes, interviniendo en un mueble donde preparaban la droga, cocaína en cantidad suficiente para preparar cuatro mil trescientas ochenta y seis dosis, setecientos gramos de una sustancia blanquecina utilizada para adulterar la droga y conocida como "corte magic", dos báculas de precisión, dos goteros de reactivos para determinar la calidad de la cocaína, diversos útiles para la manipulación de la droga, como envases, cucharas, navajas y recortes de plástico para envolver la sustancia, además de 2.265 euros.

Asimismo, en otro de los vehículos que posee el principal responsable de la red, y que se encontraba estacionado enfrente del negocio, se intervienen doce envoltorios conteniendo cocaína dispuestos para su venta, con pesos que oscilan entre el medio gramo y el gramo.